Uno de los temas más importantes durante la próxima temporada de calor es incrementar el consumo de agua natural y reducir el de bebidas azucaradas, pues aun cuando sean naturales tienen un alto contenido de fructuosa que va al torrente sanguíneo y produce glucemia, indicó la nutrióloga y consultora independiente Iride Jiménez López.
Reiteró que se debe priorizar el consumo de agua natural para todos los miembros de la familia, aunque los bebés estarían exentos ya que si consumen leche materna no les hará falta el agua; sin embargo a los adultos mayores sí se les debe poner mucha atención porque son quienes más padecen de deshidratación. Éstos tienden a sentirse satisfechos con el agua, por lo cual consumen muy poca.
Asentó que los bebés no necesitan consumir tés, agua ni atoles, pues con el consumo de leche materna a libre demanda estarán más que hidratados.
En vista de que el 80 por ciento de los mexicanos prefieren los refrescos y bebidas azucaradas, lo mejor que las madres de familia pueden hacer es procurar el consumo de agua natural incluso a la hora de la comida o intercambiarla por aguas de frutas naturales sin azúcar, pues incluso los jugos naturales rebasan los niveles de fructuosa recomendada.
De éstos solo se podrá consumir media taza, pero no el medio litro o el litro completo que equivale a cuatro tazas pero a 8 equivalentes de azúcar, explicó la también docente, quien se encuentra en Facebook como LN Iride Jiménez López y en Instagram como lniride.
El consumo de agua de frutas debe ser en menor cantidad y se pueden consumir tés e infusiones sin aporte calórico, lo que no es recomendable son los raspados, smoothies, helados o nieves porque al no quitar la sed, las personas quieren consumir otro y lo que menos hacen es hidratar y se necesitaría consumir más agua para tener un equilibrio, advirtió.
Recomendó asimismo la ingesta de ensaladas hechas a base de legumbres, verduras con cáscara y frutas naturales y cereales con cáscara para aprovechar la fibra, reducir la ingesta de alimentos refinados.