Durante la realización de las jornadas de capacitación y evaluación de la participación ciudadana, el Órgano de Fiscalización Superior del estado detectó inconsistencias en la integración de los órganos de participación ciudadana; la razón, informó Flor Alicia Zamora Pozos, auditora especial de Fortalecimiento Institucional y Participación Ciudadana del Orfis, es que “los criterios para la integración de esos órganos no están estandarizados en los 212 ayuntamientos”. Las mencionadas jornadas se realizaron con la finalidad de conocer la forma en que los ayuntamientos cumplieron con la normatividad que se debe aplicar para una correcta integración y funcionamiento del Consejo de Planeación para el Desarrollo Municipal (Coplademun), del Consejo de Desarrollo Municipal (CDM) y de los Comités de Contraloría Social (CCS).
La servidora pública, dijo durante su intervención en el programa “De acceso público” del Orfis, que el tránsito hacia la contraloría social es nuevo y que por ello se deben sentar las bases metodológicas con la finalidad de que el control social tome más importancia. “A la contraloría social se le debe dar la importancia que tiene no sólo para la vigilancia en el uso de los recursos públicos, sino para el acompañamiento a las autoridades en el quehacer gubernamental y en la toma de decisiones”, dijo.
Refirió que en muchos casos se ha detectado que no existe una correcta integración y operación de los órganos de participación ciudadana, pero que ello se debe a que la normativa es muy general y sólo establece que debe existir un Comité de Participación Ciudadana en cada ayuntamiento sin precisar quiénes deben de participar en él, cuál es el rol que deben cumplir y qué resultados deben presentar.
“Hay procedimientos heterogéneos, cada quien hace las cosas como cree que debe hacerlas y hay grandes diferencias entre los ayuntamientos; no tienen documentación soporte y en algunos la capacidad institucional es limitada para el desarrollo de esta gran responsabilidad. Además, no hay actas, no se levantan minutas de las reuniones y se invita a los ciudadanos a participar de manera informal”, expresó.
El Coplademun, recordó la entrevistada, es la figura responsable de la elaboración del Plan de Desarrollo Municipal, de darle seguimiento y evaluarlo; el CDM es la instancia que vigila la aplicación del Fondo para el Fortalecimiento de la Infraestructura Social Municipal (FISUM) destinado para abatir la pobreza y el rezago social; y el CCS se integra por cada obra que se realiza. Por esa razón, dijo, el Orfis elaboró las Guías para la Integración y Funcionamiento del Coplademun, del CDM y de los CCS, las cuales contribuirán a homologar esas labores en todos los municipios de Veracruz en respaldo a uno de los ejes rectores de los sistemas nacional y estatal anticorrupción.
“Las guías contienen el marco jurídico, el contexto de la importancia de la participación social, cómo se define cada uno de los tres órganos, la estructura que debe tener cada uno, las atribuciones, las etapas en las que trabajan, modelos de convocatoria para invitar, los lineamientos de la capacitación, modelos de las actas de integración, de asamblea, de entrega/recepción y de las listas de asistencia. También contienen los formatos de una obra, las cédulas con que los comités deben registrar los avances y en su caso, las inconsistencias, formatos para la presentación de quejas y denuncias antes las contralorías municipales en el caso de que se encuentren inconsistencias de que la obra no inició en la fecha programada, que la constructora dejó abandonada la obra, que hay material que la lluvia se está llevando, que la obra no se está realizando con las características técnicas y de calidad”, aseveró