Pese a ser un monumento histórico protegido, presuntamente el Instituto Nacional de Antropología e Historia permitió la colocación de las letras del municipio en el atrio de la Iglesia de San Mateo Apóstol en este municipio, enclavado en la Sierra Totonaca.
Cabe mencionar que la iglesia fue construida en los años de 1630 a 1670 y los trabajos se prolongaron un poco más de 100 años, al ser edificada por etapas y finalmente fue concluida en 1874.