Xalapa, Ver.- El comercio informal en Xalapa no solamente refleja una economía insana sino también la existencia de una pobreza enorme no solamente en la capital del estado sino también en otras ciudades veracruzanas y del país, afirmó José Rogelio Ibáñez Espinoza, presidente de Activación Empresarial para los Centros Históricos de la República Mexicana. “En Xalapa, en ciudades de Veracruz y del país tenemos infinidad de gente que se dedica al comercio informal porque hay pobres y necesidad de trabajar y en ello hay que admitir que las personas que tienen recursos ponen un negocio en la calle y contratan gente para que lo atiendan y así hay muchos locales que no son atendidos por sus propietarios”, dijo.
Reiteró que en general, la situación que se observa es que existe un país con gente muy pobre y que la misma pobreza orilla a las personas a trabajar en situación de calle, pero también revela que existe una completa incapacidad de las autoridades municipales y estatales para crear proyectos o planes en los cuales se pueda ubicar a los comerciantes informales en espacios dignos. “Las autoridades no han tenido la capacidad de promover espacios dignos para que estas personas puedan trabajar y puedan, además, pagar un régimen tributario con la finalidad de que el municipio y el estado sean beneficiados y al mismo tiempo los comerciantes tengan alguna seguridad”, señaló.
El entrevistado refirió que los comerciantes informales en Xalapa corren muchos riesgos porque las calles del Centro Histórico no están bien diseñadas además de que el tráfico vehicular es excesivo. “Tenemos muchas pendientes y aglomeración de vehículos transitando constantemente y ello es muy delicado porque suele haber accidentes que pueden llegar a lesionar a los comerciantes informales; por ello, la autoridad municipal debe negociar con ellos para ver la posibilidad de ser reubicados en donde no corran riesgos”, expresó.
Recordó que el fenómeno del comercio informal detonó durante las administraciones de Américo Zuñiga Martínez y Elízabeth Morales García. “Ellos son quienes empezaron a permitir que en las calles se pusieran las personas a ofrecer sus mercancías, cosa que de alguna forma no se ha podido erradicar, todos los esfuerzos que se hicieron en administraciones como la de Reynaldo Escobar, quien dejó limpias las calles de ambulantes, se vinieron abajo con las administraciones de Américo y Elízabeth porque se dedicaron a otorgar permisos a diestra y siniestra y llenaron nuevamente las calles del centro histórico de comerciantes informales”, dijo.
José Rogelio Ibáñez Espinoza estimo que fácilmente las administraciones de Américo Zúñiga y Elizabeth Morales hicieron crecer al ambulantaje hasta en un 70 y 80 por ciento, si es que no lo duplicaron aun sabiendo los riesgos que la gente puede correr al comerciar en la calle.
