Cuando un bebé llega a la familia como padres nos preocupamos por su salud, alimentación, desarrollo y descanso, pero también por mantenerlo seguro en su traslado a bordo de nuestro vehículo. Sin importar que se trate de un viaje corto o largo, debe estar protegido y sentirse cómodo durante el recorrido, por lo que una de las acciones primordiales es elegir la silla que mejor se adapte a sus necesidades.
En el mercado existe una amplia variedad de sillas, cuyos precios menores son de mil 800 pesos y máximos de 11 mil pesos;sin embargo, para realizar la compra, además del bolsillo, se deben considerar sus características y funcionalidad. Lo primero a tomar en cuenta previo a la compra es el peso y la edad del pequeño, pues con ello se garantizará su seguridad. En las tiendas departamentales y aquellas especializadas en artículos para bebés se ofrecen tres tipos de sillas: para los menores de hasta 15 meses o máximo 13 kilogramos, de los cuatro años de edad o entre 9 y 18 kilogramos, y las sillas orientadas que son especiales para los niños que tienen un peso entre los 15 y 36 kilogramos.
Al tener claro el tipo de silla que se necesita, se debe verificar si la pieza seleccionada es compatible con el modelo del vehículo, lo cual se puede comprobar con las instrucciones de la empresa fabricante.
Una de las recomendaciones primordiales de las empresas respecto a las sillas es elegir una con sistema insofix, denominación que se le da a las piezas que tienen un anclaje que permite a estabilidad logrando que permanezca en su lugar en caso de sufrir un impacto.
Al colocar la silla en el vehículo se debe comprobar que quede perfectamente sujeta con el cinturón de seguridad y para ello también se tendrá que considerar si la silla tiene elevador, es decir, que el respaldo tenga la posibilidad de ajuste conforme a la edad de nuestro hijo.
Lo aconsejable al momento de poner al menor en la silla es que su respaldo permanezca en forma de “V”, ya que con ello se protegerán la cabeza y los hombros a cualquier edad.
La mejor manera de hacer sentir seguros a nuestros hijos es colocar la silla en una posición de tal forma que se pueda observar por el retrovisor mientras se maneja.
En caso de que el espejo retrovisor que trae el vehículo se considere insuficiente para observar a detalle los movimientos que realiza el bebé durante el traslado, se puede recurrir a alguna de las piezas especiales que se ofrecen en las tiendas departamentales.
Los retrovisores tienen diferentes características, entre estas ajustarse al espacio, girar 360 grados, ser redondos o portar luz;se pueden conseguir también en tiendas en línea a costos que van desde los 400 hasta los mil 200 pesos.
Y como el bebé también necesita tener un paseo agradable vehículo se puede instalar una pantalla, ya sea sobre el techo o en la parte trasera del cabezal del sillón.
