En las prisiones veracruzanas se encuentran 5,023 personas privadas de la libertad a la espera de una sentencia definitiva y que aún gozan del derecho de presunción de inocencia. De acuerdo con el Censo Nacional de Sistemas Penitenciarios Estatales (CNSIPEE) 2024 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el 31.3 por ciento de las personas sin sentencia lleva recluida dos años o más.
De un total de 7,873 personas privadas de la libertad en el sistema penitenciario estatal, 5 mil 023 están sin sentencia y 2 mil 850 cumplen una sentencia.
El Censo Nacional reporta que de las 5,023 personas recluidas sin sentencia en las prisiones veracruzanas, 2 mil 700 se encuentran bajo prisión preventiva oficiosa, 1,574 bajo prisión preventiva justificada y 749 bajo otro supuesto jurídico.
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Los Centros de Reinserción Social (Ceresos) con mayor número de presuntos inocentes son los Ceresos de Coatzacoalcos, Amatlán de los Reyes y Xalapa-Pacho Viejo, con un total de 2 mil 621 personas privadas de la libertad sin sentencia, lo que representa el 52.2 por ciento del total de personas privadas de la libertad sin sentencia.
¿Qué cárceles concentran el mayor número de presuntos inocentes en Veracruz?
El Cereso Duport Ostión de Coatzacoalcos alberga a 933 presuntos inocentes; Amatlán de los Reyes, 868; y Xalapa-Pacho Viejo, 820.
Les siguen los Ceresos de Tuxpan (356), Poza Rica (346), Acayucan (288), San Andrés Tuxtla (259), Papantla (229), Misantla (213), Cosamaloapan (170), Jalacingo (120), Pánuco (86), Tantoyuca (82), Ozuluama (60), Chicontepec (59), Zongolica (56) y el Módulo de Prisión Preventiva en Veracruz (42).
En 2023, del total de la población privada de la libertad sin sentencia en el estado de Veracruz, el 53.8 por ciento estaba en prisión preventiva oficiosa; el 31.3 por ciento, en prisión preventiva justificada; y el 14.9 por ciento, en otro supuesto jurídico.
Las prisiones estatales que concentran el mayor número de personas recluidas bajo medida cautelar de prisión preventiva oficiosa son Amatlán (534), Xalapa-Pacho Viejo (492), Coatzacoalcos (371), Tuxpan (227) y Poza Rica (171).
En tanto, las cárceles con mayor número de personas bajo la medida cautelar de prisión preventiva justificada son los Ceresos de Coatzacoalcos (379), Xalapa-Pacho Viejo (259), Amatlán (223), Poza Rica (109) y Tuxpan (97).
Sobre el tiempo en espera de sentencia para las personas privadas de la libertad, el 31.3 por ciento (1,573 personas) ha esperado dos años o más; el 22.1 por ciento (1,110 personas) lleva entre 12 y 24 meses en espera de una sentencia.
Mientras tanto, 976 personas en espera de sentencia en uno de los centros penitenciarios estatales registraron entre seis y menos de 12 meses de tiempo de espera de sentencia; 693 personas esperaron de tres a menos de seis meses por una sentencia; y 671 personas esperaron menos de tres meses por una sentencia.
¿Cuántos de los presos son hombres y cuántas mujeres en Veracruz?
De las 1,573 personas que llevan dos años o más en espera de una sentencia, 1,442 son hombres y 131 mujeres. La mayoría de esta población ha sido recluida en el Cereso de Xalapa-Pacho Viejo, el cual es la prisión con el mayor número de personas sin sentencia recluidas por más de dos años.
En contraste, el Cereso de Coatzacoalcos es donde las personas privadas de la libertad pasan menos tiempo en espera para recibir una sentencia. En 2023, 284 personas recluidas en el Duport Ostión de Coatzacoalcos esperaron menos de tres meses para recibir una sentencia; 247 personas esperaron de tres a menos de seis meses; y 234 personas esperaron de seis a menos de 12 meses.
En 2023, se reportó que las personas adultas privadas de la libertad y las personas adolescentes internadas en Veracruz cometieron 10,857 delitos.
Del total de los delitos en el ámbito estatal, Veracruz ocupa el octavo lugar a nivel nacional, superado por el Estado de México, Ciudad de México, Jalisco, Nuevo León, Baja California, Sonora y Chihuahua.
En cuanto a los delitos cometidos por hombres privados de la libertad o internados, el secuestro fue el más común en los Centros Penitenciarios Federales, mientras que el robo predominó en los centros penitenciarios estatales y centros especializados.
De manera similar, el secuestro también fue el delito más común entre las mujeres privadas de la libertad o internadas en los Centros Penitenciarios Federales, mientras que el robo fue el delito más registrado en los centros penitenciarios estatales y centros especializados
