Veracruz, Ver.- Por la transfobia de unos sujetos que dijeron “odiar a los gays”, Fany estuvo a punto de perder la vida, fue golpeada y humillada en céntricas calles de Veracruz y ni siquiera los policías le brindaron el apoyo a pesar de su estado.
El día que Fany estuvo a punto de morir por la transfobia en Veracruz
Como pudo, la mujer trans logró llegar a su casa, casi desnuda, con sus ropas desgarradas y sangrando de la cara por los golpes que le propinaron.
Relata que hace dos meses, mientras caminaba por las calles de Velázquez de la Cadena y Revillagigedo en el centro de la ciudad de Veracruz, unos hombres empezaron a molestarla con insultos, a los que trato de no hacer caso.
Dice que eran tres hombres, quienes la siguieron y aprovecharon las solitarias calles para maltratarla con palabras agresivas para después golpearla.
“Eran como las seis o siete de la tarde, los sujetos que al parecer no eran de aquí de Veracruz iban saliendo de un hotel que está en Velázquez de la Cadena y Revillagigedo yo andaba vendiendo mis palanquetas y empezaron a molestarme, me gritaron ofensas, de joto, puto, me quisieron agarrar a la fuerza, me pegaron, me dijeron que ellos odiaban a los gays, que nosotros los gays deberíamos estar muertos, me golpearon hasta que se cansaron, querían que les pidiera perdón por ser gay”, expresa.
Asegura que trató de pedir ayuda pues una patrulla pasó por el lugar, pero los policías prefirieron ignorarla y le dijeron que “no te paso nada”.
Sin embargo, la golpiza le dejó fracturas en la costilla izquierda y lesiones en su cuerpo, tuvo que estar en cama por varios días para recuperarse, pero el recuerdo de lo sucedido la sigue lastimando.
“Estuve en cama, no podía pararme, no podía hacer del baño, me lastimaron mis partes íntimas, yo voy al día, soy una persona que trabaja de comerciante, vendiendo cosas que yo preparo y limpiando casas, pero por casi dos meses apenas y podía moverme de la tranquiza que me metieron, yo no los provoque, no les dije nada, solo por homofóbicos, transfóbicos”, expresa.
Menciona que no es la primera vez que sufre de este tipo de humillaciones, pues ya había sido víctima de otros abusos debido a su preferencia sexual, sufriendo la homofobia y transfobia de algunas personas, incluso dentro de su familia.
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Cuenta que desde pequeña fue abusada sexualmente por un tío y actualmente solo cuenta con el apoyo de su madre, el resto de la familia la rechaza.
Reconoce que el abuso que sufrió, le generó muchos problemas de depresión, ansiedad y en medio de la confusión sin ningún tipo de ayuda encaminó su vida hacía cosas negativas.
“Yo sufrí abuso sexual a los nueve años por parte de un tío, si lograron meterlo a la cárcel, pero eso me trajo muchos problemas de depresión, también hice cosas de las que ahora estoy consciente que no estuvieron bien, sufrí el rechazo de mi abuelo que nunca me acepto, actualmente mi madre es la única que ha estado conmigo, que me apoya y que me cuidó estos dos meses que estuve en cama”, expresa.
Fany pide respeto y una vida plena sin miedo
Actualmente, Fany tiene 29 años de edad y afirma que ella solo quiere vivir una vida tranquila, donde la gente la respete y la acepte, pues asegura que dentro de la comunidad LGBTQ+ hay personas buenas que solo quieren salir adelante sin hacerle daño a otras.
Además de que refiere que por la homofobia y transfobia, muchas compañeras y compañeros han muerto, sumándose a esa lista de crímenes de odio en Veracruz.
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“Yo quiero que nos dejen en paz, que nos dejen vivir, que nos dejen de estar discriminando, que dejen esa homofobia y transfobia, ¿Cuántas compañeras no han matado por la homofobia, porque no aceptan la vida que tenemos”, yo soy una chica trans y quiero vivir feliz, no le hago daño a nadie”, sostiene.
Este 17 de mayo se conmemora el Día Internacional contra la Homofobia, Transfobia y la Bifobia y con esto se busca combatir la discriminación, la exclusión social y la violencia basada en la orientación sexual o la identidad de género.
