El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, reconoció que no ha decretado, ni solicitado eliminar la requisa del puerto de Veracruz, ordenada en 1991 por el entonces Presidente Carlos Salinas de Gortari, la cual consistió en despedir a cientos de trabajadores sindicalizados para dar paso a la privatización de la operación portuaria.
En la conferencia de prensa de esta mañana, el mandatario federal fue cuestionado sobre un presunto acuerdo interinstitucional entre el Sindicato de Maniobristas y el gobierno federal en el que se ordena devolver los bienes despojados a los trabajadores portuarios y reponerles su fuente de trabajo.
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Ante ello, el mandatario federal indicó que pedirá a la titular de la Secretaría del Trabajo, Previsión Social y Productividad, Luisa María Alcalde, que le entregue la información relacionada con el tema.
"Ella debe tener toda la información para que los interesados trabajadores y empresas conozcan sobre este procedimiento, si se llevó a cabo, en qué consiste, cuál fue el fallo legal", expuso.
En el cuestionamiento se le señaló que la Secretaria del Trabajo ya había desmentido tal acuerdo, por lo que López Obrador mencionó que se trata de un tema que debe ser aclarado en su totalidad.
"Que se aclare, aquí vamos a pedirle a la Secretaria y al Secretario de Gobernación que informen sobre este tema", dijo.
¿Usted emitió este decreto?, se le cuestionó, a lo que respondió: No, pero hay un lineamiento general y es que se haga justicia a los trabajadores, siempre.
Con la requisa de 1991, trabajadores sindicalizados en el puerto de Veracruz perdieron los empleos que habían sido decretados en 1973 por el Presidente Luis Echeverría. Ante ello, Carlos Salinas de Gortari abrió la privatización del puerto con una concesión de 50 años.
