Córdoba, Ver.- Por lo menos un centenar de centroamericanos, indocumentados, entre hombres, mujeres, jóvenes y niños caminan a la orilla de la autopista Veracruz-México con el propósito de llegar a la ciudad de Puebla. Hacen un alto a la altura de Rancho Trejo para recibir agua, alimentos que la población, así como organismos de ayuda prepararon para ellos; además de atención médica para quienes presentan algún malestar.
Uno de ellos relata que su paso por territorio veracruzano ha sido difícil pues tramos largos los caminan y en otros a veces les dan aventón. Entre todos se cuidan, mientras que los líderes esperan a las mujeres y los niños que se atrasan.
“En algunas comunidades los dirigentes nos apoyaban, se ponían abusados, pero más adelante como se hizo tanta gente ya no alcanza el presupuesto de las personas para apoyarnos con el transporte, se ha ido desvaneciendo el apoyo”.
Destacó que lo que sí se ha mantenido es la atención médica y los medicamentos, “es lo único bueno, que no nos ha faltado; a donde hemos llegado nos han dado refugio y comida, lo demás corre por nuestra cuenta; los federales también nos han dado seguridad”.
Tras mencionar que en este lugar esperarán a los que todavía vienen atrás recordó que ayer en Isla había todavía alrededor de 400 centroamericanos, principalmente de Honduras, El Salvador y Guatemala, que se desplazan a pie pues no encontraron raid.
