Xalapa, Ver.- Aunque en gobiernos municipales anteriores se construyeron —y se siguen haciendo— colectores pluviales en zonas vulnerables a inundaciones, éstos han sido insuficientes para evitar las anegaciones, lo que provoca que cada año en temporada de lluvias los estragos continúen.
Para los especialistas, si bien esas infraestructuras son necesarias, son insuficientes porque la ciudad ha crecido de manera desordenada.
“Son un instrumento necesario para amortiguar los efectos de la precipitación en el entorno urbano. Son una herramienta fundamental para hacer una gestión adecuada del recurso hídrico en cualquier ciudad. En Xalapa funcionan, habían funcionado más o menos bien en cuanto la ciudad se mantenía con un crecimiento urbano adecuado”, dijo el investigador del Centro de Ciencias de la Tierra de la Universidad Veracruzana, Carlos Welsh Rodríguez.
Sin embargo, en los últimos 30 años Xalapa ha crecido de manera desordenada, lo que ha puesto en evidencia que el diseño hidráulico para mantener fuera de peligro algunas zonas ha sido insuficiente.
Recordó que antes siempre se hablaba de las inundaciones en las colonias Revolución y 21 de Marzo, pero ahora las zonas afectadas son muchas más, lo que se debe al crecimiento no planificado.
Aun más, actualmente existen periodos de lluvia de mayor intensidad y en menos espacio de tiempo, lo que hace que el riesgo de inundación aumente.
El riesgo que es la componente humana se está incrementando por los factores que menciono, población viviendo en lugares donde no estaban diseñados para esto y una infraestructura que no soporta estas nuevas condiciones de lluvia
Ante ello, consideró que la ciudadanía poco puede hacer, pues esa situación va más allá de la parte individual; dijo que el tirar basura en las calles que tapa las atarjeas no es la única causa de las anegaciones que requieren de una solución compleja.
El gerente del Jardín Botánico “Francisco Xavier Clavijero”, Orlik Gómez García, coincidió en que los grandes colectores son necesarios, pues la ciudad tiene perdidos sus cauces naturales de agua y al estar urbanizado la mayor parte del territorio y zonas que nunca debieron estarlo, el flujo de agua de lluvia es enorme.
“Y como son pendientes arrastra tierra, piedras, suelo y residuos, es la parte donde la sociedad debe intervenir y parece que no entendemos, le da lo mismo; necesitan ser dirigidos por estas infraestructuras que colectan grandes cantidades de agua y la dirigen hacia los escasos cuerpos naturales como ríos y arroyos que atraviesan la ciudad”, dijo.
Aunque son necesarios, subrayó, mientras la sociedad le siga dejando al gobierno municipal la tarea de conducir estas aguas y mientras no entienda su labor de no depositar la basura en los sitios inapropiados, nada va a funcionar.
De acuerdo con el alcalde Hipólito Rodríguez Herrero, para mitigar los efectos negativos de las precipitaciones pluviales en este 2019 se espera la construcción de por lo menos cuatro colectores pluviales que beneficiarían a zonas como Carolina Anaya, bulevar Diamante, Casa Blanca y colonia Veracruz, donde pobladores resultan con afectaciones en cada temporada de lluvias.
Expuso que en su gobierno se tienen proyectadas varias obras de drenaje sanitario y colectores pluviales. Los prioritarios son tres: El Amazonas, Coatzacoalcos y Gutiérrez Barrios, donde se invertirán cerca de 60 millones de pesos.
Y drenajes sanitarios y drenajes pluviales son muchísimos, este año hay una inversión muy fuerte en estos campos
El edil apuntó que se están revisando los colectores que se construyeron en administraciones pasadas, cuyas etapas no se han concluido para poder terminarlos. “No puede ser que estemos trabajando de manera fragmentaria, vamos a cuidar que culminen esos procesos, cuestan mucho dinero”.
Así, refirió que en este 2019, con ayuda de la Comisión Nacional del Agua y el gobierno estatal, estarán buscando que esos proyectos concluyan y se llegue a donde debe que es principalmente al río Sedeño.
El exhorto por parte de las autoridades municipales es que la población no tire basura en las calles, pues en cada época de lluvias se encuentran montones de residuos en las atarjeas.
Todos somos responsables de nuestros residuos; las familias y personas que dejan sus residuos fuera de horario, en la calle, son las que están ocasionando que se tapen las alcantarillas, tragatormentas, resumideros, ellos son corresponsables del problema
El regidor Rafael Pérez Hernández, de la comisión edilicia de Obras Públicas, expuso que a través del Fondo de Infraestructura Social Municipal hay 44 obras de drenaje sanitario para la ciudad este año. 31 serían de red hidráulica y 13 de rehabilitación.
Precisó que en el caso de los colectores se trata del Río Amazonas en su cuarta etapa, en la avenida Montes Himalaya de la colonia Casa Blanca, con una inversión de 23 millones 250 mil pesos.
Asimismo, el Río Coatzacoalcos en su tercera etapa, ubicado en la calle del mismo nombre, entre las calles Mar Caspio y Zapoteca, que beneficiaría a diversas colonias con una inversión de 22 millones 45 mil.
También en el bulevar Diamante entre Arroyo Papas y la entrada al Seminario de la colonia Molinos de la Pedreguera, con una inversión de 2 millones 500 mil pesos.
El cuarto sería en la calle Ángel Carbajal de la colonia Emiliano Zapata, con una inversión de 400 mil pesos, así como uno en la calle Insurgentes en la colonia 21 de Marzo, cuya inversión es de un millón 500 mil pesos, y una en la calle Aguas de Xalapa de la colonia Veracruz, con 650 mil pesos de inversión.
Refirió que varias de estas obras ya se llevan a cabo y negó que haya algún riesgo de que no se realice y concreten antes de terminar el año.
Remarcó que aunque varios de estos proyectos de colectores se iniciaron en gobiernos anteriores, al estar inconclusos se impide que tengan la capacidad y funcionamiento que deberían, lo que provoca que las inundaciones continúen.
Se está vigilando, las empresas siguen dejando una fianza de vicios ocultos y ya se ha pedido a las empresas que trabajen con calidad y aquí ya no hay petición de que le tengan que dar a alguien un 10 o 20%, como se ha dicho que anteriormente se hacía
