Campesinos, productores y ambientalistas veracruzanos exigieron un reajuste a las tarifas de energía eléctrica en el estado antes de los tres años que se anunciaron, pues dijeron que no tiene porqué existir distinciones entre estados si todos somos mexicanos.
“Si en Tabasco los están haciendo, por qué aquí van a tardar tanto. Todos somos trabajadores, todos somos mexicanos y yo creo que no debe haber distinciones, todos deberíamos tener los mismos derechos”, dijo Darío Cadena Alarcón, consejero del Consejo Regional del Café de Coatepec.
Moisés Reyes Fausto, secretario general de la Central Campesina Cardenista (CCC) en el estado de Veracruz, dijo que esa es una lucha que se ha dado en Veracruz desde hace muchos años, incluso antes que Tabasco.
“Porque a diferencia de Tabasco que no tiene ninguna obra que genere electricidad porque la mayoría de ellas están ubicados en Chiapas, en Veracruz sí tenemos la nucleoeléctrica Laguna Verde que genera un buen porcentaje de la electricidad que se consume sobre todo en la zona sur-sureste del país y el centro y aun así seguimos pagando tarifas altas”, dijo.
Señaló que esto no es sólo en consumo doméstico sino también en el agrícola.
La exigencia, añadió, no es un “borrón y cuenta nueva” sino que reduzcan las tarifas de consumo dado que es injusto que quien pague la generación de electricidad para otros estados no tenga un beneficio.
Respecto a la tarifa agrícola, la situación empeora dado que en las pocas regiones con obras hidráulicas para riego y tecnificación del campo, no pueden utilizarse por lo costoso de la energía eléctrica.
Señaló que en el gobierno de Fidel Herrera se construyeron muchos Pozos agrícolas y casi el 90% está sin uso porque los productores no las pueden usar dado que se entregaron sin equipamiento además de que donde sí lo tienen es muy costoso hacer uso de éstas.
“Yo creo que una tarifa justa de acuerdo a las condiciones que tenemos en Veracruz sería hacerle justicia a una demanda de la población veracruzana que ya tiene muchos años, incluso han habido muchos encarcelados por esta lucha que se ha dado sobre todo en la zona aledaña a Laguna Verde”, dijo.
Darío Cadena Alarcón consejero del Consejo Regional del Café de Coatepec, dijo que ellos son afectados porque en las actividades del café utilizan energía eléctrica.
“En los beneficios donde se tienen secadoras es lo que consume y toda la maquinaria que nosotros ocupamos para el café utiliza energía. Además no sé por qué en los beneficios sale muy cara la energía, es demasiado, no sé qué tarifa es la que nos cobran pero es muy elevado”, añadió.
Remarcó que están incluso pensando en utilizar paneles solares, aunque requieran de inicio una fuerte inversión, dado que las tarifas de energía eléctrica se están volviendo impagables.
Ascensión Sánchez Vázquez ambientalista veracruzano, se sumó al llamado para que se reconsideren las tarifas de energía eléctrica y se hagan algunas adecuaciones para no afectar a la población.
Yo creo que es muy lógica la exigencia de disminución de las tarifas, porque nuestro estado es un estado energético en muchos sentidos y en verdad tenemos tarifas muy altas, entonces yo creo que los reclamos de la sociedad sí tienen un buen fundamento
Apuntó que es paradójico que sea en la costa donde está asentada la central nucleoeléctrica donde se tengan las tarifas más altas por ser una zona calurosa.
Guillermo Rodríguez Curiel, de La Asociación Veracruzana de Iniciativas de Defensa Ambiental (Lavida), refirió que en varias ocasiones han solicitado que exista ese reajuste.
Sin embargo, refirió que también se han pronunciado porque el Gobierno federal inicie un tránsito hacia energías limpias y renovables.
“Tenemos que pensar en otro tipo de energía que no sea petrolífera ni de mineral fósil que contribuye a lo que conocemos como calentamiento global. Lavida se suma al llamado al gobierno federal para que se ajusten las tarifas y que a quienes están en resistencia para no pagar las altas tarifas se les condone la deuda igual que a los de Tabasco, que haya borrón y cuenta nueva”, añadió.
Subrayó que no se puede esperar hasta el 2022 para la adecuación, puesto que ello se tendría que hacer este mismo año.
