Al caer la noche, las almas de aquellos difuntos que no pueden descansar en paz salen a vagar por los pasillos del panteón xalapeño, o al menos eso asegura José Eduardo de 20 años, quien desde los 6 trabaja arreglando tumbas y nichos en diversos panteones de la ciudad. Entrevistado mientras ofrece sus servicios de limpieza, pintura y albañilería, el joven cuenta que le ha tocado ver cosas sobrenaturales sobre todo en el panteón xalapeño.Aquí sí se ven cosas raras y se sienten presencias
El joven narra que en una zona del panteón se escucha música que va haciéndose más fuerte conforme te acercas a una tumba.
Son una familia de músicos que murieron juntos y todavía tocan. Nadie los verá ni nada pero la música si se escucha en algunos días
En el mismo panteón, hay una muñeca que llama la atención debido a que muchas personas aseguran haberla visto cambiar de lugar en incluso han notado que el color de su vestido cambia en cuestión de minutos.
La tumba pertenece a una pequeña de nombre Angelita que falleció en 1978 y cuyos familiares la recuerdan con ese juguete. Mueve los ojos o gira la cabeza dependiendo de quién la vea. La gente viene buscando a la muñeca de Angelita porque ya es conocido que esa muñeca hace cosas raras, incluso hay quienes dicen que la han visto fuera de la tumba pero eso yo no lo he visto
José Eduardo asegura que su vida entera la ha pasado entre tumbas, lápidas y muertos pero que pese a esto nunca ha tenido miedo de las fuerzas del más allá que ha sentido en muchas ocasiones.
“En el panteón de 5 de febrero hay un hombre enterrado que hizo pacto con el diablo y aún se mantiene.
Dicen que si entras a su tumba y le pides dinero o algo el te lo concede pero a cambio se cobra con la vida de alguien que tú quieras mucho. Yo nunca haría algo así pero supongo que sí hay gente que lo haga por ambición”.