Se requiere mayor inclusión en las escuelas, pero sobre todo mayor cultura en la sociedad para que los niños con capacidades diferentes como es el caso del síndrome de Down no sean víctimas de bullying, expresó la directora del Instituto Down de Xalapa, Marcela Espino Vargas.
Luego de entregar los reconocimientos a Naida Ramírez Busto y Paola Bravo Fragoso quienes obtuvieron medallas en las olimpiadas especiales celebradas en el estado de Puebla indicó que esto es un reconocimiento a la diversidad, pues aún se sigue luchando contra muchos prejuicios en las escuelas.
Sigue habiendo el rechazo y el bullying hacia la observación a los jóvenes con síndrome de Down, ya que es muy evidente físicamente su condición, pues todavía falta que la sociedad, los maestros y la cultura den otra perspectiva y este reconocimiento es para que vean que las múltiples inteligencias existen y todos podemos destacar en algo Directora del Instituto Down de Xalapa
Expresó que en el Instituto Down llegan jóvenes con mucha agresividad porque en las escuelas fueron agredidos y es que lamentó que no sólo es la condición de los maestros, sino también las escuelas que poseen grupos numerosos y el maestro no puede tener ojos para todos los estudiantes.
Pero a esto se suma el que existe mucha crueldad por parte de los jóvenes y es que quienes poseen síndrome de Down no son agresivos, pero si responden a las situaciones de las que son víctimas en las escuelas, pero en el Instituto Down cambian esta forma de ser, pues se sienten aceptados.
Expuso que se habla de escuelas inclusivas, pero la realidad es que esto sigue siendo un reto y aunque refirió que no puede hablar de esto de manera general, lo que si puede señalar con una maestría en inclusión es que al conocer las historias de quienes llegan al Instituto Down es que en muchos lugares no hay esa aceptación por temor o desconocimiento.
“Todavía nos falta mucho para hablar de que en el estado y en el país estemos hablando de una verdadera inclusión, se ha tratado pero aún tenemos muchas carencias”, resaltó.
Espino Vargas refirió que los padres de los niños Down deben colaborar con los maestros y hacer una labor con toda la población, pero los directores de las escuelas también deben ser líderes para que hagan labor, pues también pueden tener estudiantes con alguna situación especial ya sean ciegos, sordos o con alguna situación neuromotor.
Reiteró que no es necesario que haya tantas leyes, simplemente debe haber una sensibilidad por parte de la sociedad y la realidad es que no la hay.
“Hay apertura, programas y ahora salen más noticias con respecto a que hay jóvenes con síndrome de Down en un restaurante y aquí tenemos una cafetería y una lavandería, porque queremos que se demuestre que en Veracruz se está haciendo algo”, indicó.
Por último expresó que hay muchas carencias en el Instituto y por ello se requiere apoyos incluso de la Secretaría de Educación de Veracruz y es que solo operan con 4 maestros que son pagados por los propios padres de familia y se requieren más profesores.
