A pesar de estar en plena pandemia, el Estado de Veracruz destinó 3 por ciento menos recursos a salud en comparación con 2019, según el Informe Estatal del Ejercicio del Gasto (IEEG) 2021 del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
Durante 2020, el presupuesto de egresos aprobado para Veracruz fue de 129 mil 535 millones 095 mil 247 pesos; sin embargo, se ejercieron 153 mil 616 millones 340 mil 384 pesos, con una diferencia de 24 mil 081 millones 245 mil 137 pesos, casi 15.7 por ciento más de sus recursos aprobados.
Al respecto, el estudio nacional señala que gastar por encima de lo aprobado en el presupuesto, implica un error de planeación presupuestal.
Asimismo, para el ejercicio fiscal 2020, el Poder Ejecutivo de Veracruz destinó en su conjunto 58 mil 348 millones 123 mil 929 pesos a educación, 18 mil 222 millones 566 mil 967 pesos a salud y 9 mil 917 millones 100 mil 445 pesos a seguridad y justicia.
A través del IEEG 2021, que analiza las principales partidas y variaciones reales del gasto público de los 32 poderes ejecutivos estatales, se encontró que, durante 2020, en Veracruz se destinaron menos recursos a salud, en comparación con 2019, al registrar una variación real de -3 por ciento.
Según los cálculos, el presupuesto ejercido 2019 real fue de 17,143,317,100 mdp, mientras que en 2020, fue de 16, 672,064,929 mdp.
“En 2020, la crisis sanitaria y económica derivada del Covid-19 pudo haberlos obligado a gastar diferente; sin embargo, no se detectó un reordenamiento en las prioridades”, refiere el IMCO. El gasto para educación tuvo una variación real de -1 por ciento, con un presupuesto ejercido real de 53,383,461,966 mdp en el ejercicio fiscal 2020; mientras que para 2019 fue de 53, 971,078,562 mdp.
En materia de Justicia, la variación real 2019-2020 fue de -8 por ciento, con un presupuesto ejercido real de 4,035,841,286 mdp durante 2019 y 3,729,988,924 mdp para 2020.
De acuerdo con el monitoreo y comparaciones de las prioridades del gasto público, el Informe estatal revela que en el año en el que inició la pandemia, las entidades federativas no modificaron sus prioridades acorde a la coyuntura de la crisis de salud.
“Esto propició un mal uso de los recursos públicos y dejó sin atender las verdaderas prioridades”, señala.
En 2020, los poderes ejecutivos estatales en México destinaron en promedio 34 por ciento del total de sus recursos a educación, 14 por ciento a salud y protección social en salud, y 9 por ciento a seguridad pública y justicia.
El IMCO apunta que los estados subestiman sus ingresos porque aquellos ingresos excedentes pueden gastarlos de forma discrecional.
Asimismo indica que las finanzas públicas estatales tienen grandes deficiencias en su planeación presupuestal. Esto sucede ya que una vez aprobados los presupuestos y las leyes de ingresos, los congresos locales se desentienden de su cumplimiento.
Este año los gobiernos estatales cumplieron con la Ley General de Contabilidad Gubernamental (LGCG) en un promedio de 87 por ciento para reportar sus gastos de 2020.
Para mejorar la calidad de la información financiera, el IMCO propone que el Consejo Nacional de Armonización Contable (CONAC) elimine el margen de interpretación en la normatividad, particularmente en el periodo de comparabilidad y la consolidación de información del ejercicio de recursos públicos de cada poder estatal.
De igual manera sugiere que los entes obligados publiquen en tiempo y forma su información financiera, utilizar mecanismos de participación ciudadana y consejos consultivos en materia de planeación y ejercicio del gasto.
