Queridos Reyes Magos, ya no quiero juguetes, quiero una tablet

Los tiempos han cambiado: la modernidad y la tecnología desplazaron a los juguetes tradicionales

Raymundo León

  · sábado 5 de enero de 2019

Costo de una tablet sencilla llega a los $2 mil 500; balones y carritos, en el olvido / Foto: ilustrativa

Los tiempos han cambiado para los Reyes Magos: la modernidad, la competencia en el mercado, la tecnología, las novedades, los juguetes y aparatos electrónicos sofisticados han complicado su entrega de regalos a los niños el próximo 6 de enero.

Ya nadie quiere juguetes tradicionales. Todos los niños los desean electrónicos, que hablen, que se muevan mediante control remoto, que se transformen y enciendan luces. Esos juguetes cuestan caros. Ya ni decir de los aparatos electrónicos.

“Si se tiene un niño, el gasto puede llegar a los mil pesos; si se tienen dos, entonces hay que pensar bien qué se les regala y el gasto puede ser el doble dependiendo de lo que los niños pidan, pero no siempre se les puede dar lo que ellos quieren, sino lo que el bolsillo indique”, dijo uno de los Reyes Magos durante sus compras a un costado del mercado Jáuregui.

Estos días son difíciles para los Magos de Oriente. “Hay que entender que los Reyes Magos tienen poco presupuesto, que ellos, aunque son magos y hacen maravillas para complacer a los niños, también tienen límites y por ello se les ve en varios lugares buscando los mejores precios en juguetes e incluso donde haya bonificaciones por su compra con la finalidad de hacer rendir más el dinero que tienen”, expresó Armando Jiménez, quien confesó haberlos visto sufrir en sus compras.

Una tableta, de las más sencillas, cuesta entre mil 800 y dos mil 500 pesos dependiendo de lo equipada que esté; si quiere algo más sofisticado y con capacidad de almacenaje, el precio se eleva hasta los ocho mil pesos por lo menos. Las computadoras suelen estar más caras y los teléfonos celulares no bajan de dos mil, mínimo Sandra Lara, vendedora

Foto: Jesús Escamiroza

Los Reyes Magos, sin duda, tendrán que hacer valer toda su magia para poder entregar a los niños sus regalos el próximo domingo. “Los precios de los juguetes y los electrónicos están por las nubes, pero a pesar de ello se sacrifica algo más del presupuesto con tal de ver la felicidad y las sonrisas de los reyes de casa”, coincidieron.