Mientras un gramófono reproduce música de época y el aroma de café veracruzano inunda el espacio, el coleccionista Manuel Peláez está atento por si alguien ingresa al que es uno de sus sueños hecho realidad, la cafetería El Tiempo, ubicada en el corazón de Coatepec. Diseño, creatividad y buen gusto es lo primero que cualquier visitante puede identificar en las instalaciones de Constitución número 36. Después vienen el asombro, la nostalgia y la curiosidad, pues no se trata de una cafetería convencional, allí es posible encontrar diversas colecciones que sorprenden por igual a chicos y grandes.
Sin llegar a ser un museo, El Tiempo es un boleto para viajar al pasado y conocer una gran variedad de artesanías, litografías, cuadros, piezas de porcelana, figuras de madera, espejos, juguetes, autopartes, vetustos aparatos electrónicos y hasta artículos religiosos, como santos católicos y de otras culturas. Para no incomodar a los más conservadores, no tan visible, hay una selección de fotografía erótica.
También, palas, armas, documentos antiguos y postales que dan cuenta de la historia de México y del mismo municipio que cobija a este singular espacio, pues es posible observar un busto de Porfirio Díaz y dos invitaciones originales que este expresidente envió a algunos invitados especiales para que asistieran a la inauguración del tren “El Piojito”, así como a la cena de gala, en el ya lejano 1 de mayo de 1889.
A Manuel Peláez le gusta la calidez de los coatepecanos y generar vínculos amistosos, tanto con ellos como con los turistas que deciden recorrer el sitio.
“Aunque los objetos no están a la venta, me gusta brindar información de lo expuesto a todo aquel que muestre interés”, dijo en entrevista el coleccionista profesional, quien antes de dedicarse al 100% a adquirir un sinnúmero de objetos se desempeñó como abogado en un despacho y como vendedor por internet. Acepta el originario de Nogales, Veracruz, que ser coleccionista va más allá de buscar, comprar, negociar y conservar. Se necesita estudiar para saber la antigüedad de la pieza, su procedencia, evaluar el tamaño, los materiales para su elaboración, el autor y otras cualidades que tienen que ver incluso con el impacto que en su época tuvieron en la población, ya que al valor monetario se le agrega el estético y subjetivo.
Juguetes
Manuel Peláez, quien trabaja con su socio Arturo Acosta, dice que una de las colecciones que más atención atrae es la de los juguetes, porque despiertan la nostalgia y el sentimentalismo. “Ése es el carrito que siempre quise cuando era niño, pero los Reyes Magos siempre se equivocaron de casa”, han expresado algunas personas mayores que se detienen para admirar y recordar épocas de antaño. La cafetería, que solo expende café seleccionado de Coatepec, Xico, Cosautlán y Tuzamapan, abrió sus puertas al público en diciembre de 2019, “con excelente respuesta, tanto de la comunidad como de coleccionistas de Xalapa y Veracruz, quienes llegaron a congregarse en amenas tardeadas.