Veracruz continúa viviendo en la ingobernabilidad porque la nueva administración enarbola un buen discurso, pero que sigue sin aterrizarlo en los hechos, señaló el coordinador general del Programa Interdisciplinario de Rendición de Cuentas del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), Mauricio Merino Huerta.
“A Veracruz se le ve muy emproblemado desde hace mucho, no sólo por desacuerdos políticos, sino porque han permitidos que esos desacuerdos vayan minando las instituciones, al punto de que es peligroso estar en Veracruz. El estado pasó por un periodo de ingobernabilidad muy serio, problemas muy serios y los sigue teniendo” dijo.
Entrevistado en el marco del foro “Desentrañar la Corrupción. Deshacer para Reconstruir”, organizado por los integrantes del Sistema Estatal Anticorrupción (SEA), aseveró que no se han generado cambios de fondo y en la forma en que se opera cotidianamente porque sólo se ve el discurso, pero no en los hechos.
“He visto cambios de discurso, de narrativa, magníficas intenciones, muy buenos propósitos, hay buena voluntad, pero todavía no veo con sinceridad sobre dónde están esos cambios de fondo que se necesitan” expresó.
En su opinión, continúan las prácticas con las que se sigue favoreciendo a los amigos, quienes son colocados en puestos públicos por el sólo hecho de cubrir “deudas pendientes”. “Cambia el discurso, pero no los hechos y creo que hay que ver que cambien los hechos.
En la política hablan más los hechos que las palabras y aquí hay muchas palabras y pocos hechos” comentó. En ese sentido, consideró que los Comités de Participación Ciudadana de los Sistemas Anticorrupción, sigan estando “muy verdes”, de ahí la falta de resultados en el combate a la corrupción.
“Andan medio aletargados, hay que despertar y entender que la corrupción es un problema de captura de lo público, no es un problema de cambiar gente, hay que cambiar las condiciones que hace que exista esa construcción” opinó.