Veracruzano cumple 100 años y todavía se echa sus tragos de aguardiente

Don José nació un 3 de mayo de 1920 en Ayahualulco, donde su niñez fue prácticamente de trabajo, acarreando leña y ordeñando vacas

Julián Rodríguez | Diario de Xalapa

  · martes 12 de mayo de 2020

Foto: Cortesía | Familia Trujillo

Xalapa, Ver.- Don José Trujillo Gómez es un personaje que, como dijera la canción, “nació con el siglo, con tranvía y vino tinto”, ya que recientemente cumplió 100 años de edad, pero lo mejor es que goza de un excelente estado de salud.

Don José nació un 3 de mayo de 1920 en Ayahualulco, donde su niñez fue prácticamente trabajo, ya que acarreaba leña y ordeñaba, aunque también se dio tiempo de disfrutar un poco de las canicas, el trompo, el balero, el yoyo y la rayuela, juegos tradicionales que lamentablemente con el correr de los años se han ido perdiendo.

Foto: Cortesía | Familia Trujillo

El campo fue lo suyo por muchos años, pero por allí de los 90 se metió de lleno a laborar en el área dela construcción como peón albañil. “Toda su vida ha trabajado”, dijo uno de sus familiares, quien destacó que anteriormente a don José le gustaba montar acaballo, salir a pasear el domingo, su día libre, además que era un asiduo asistente a las corridas de toros, carreras de caballos y ferias.

Es cierto que en sus años mozos le gustó la copa y el cigarro, aunque este último lo dejó hace más de 30 años. “Ya no fuma, pero de vez en cuando se echa sus tragos, incluso le traen aguardiente de Patlanalan, Puebla, ya que dice que es el secreto de su salud, pues es muy raro que se enferme”, agregó su nieto Ricardo.

Don José es el mayor de siete hermanos, de los cuales le sobrevive su hermana Rebeca Trujillo Gómez, quien por cierto también es un fiel reflejo de longevidad, ya que cuenta con 95 años de edad.

Anteriormente las familias eran numerosas, de hecho, don José procreó 12 hijos con su esposa, sin embargo, sólo le sobreviven Guillermina, Martha, Ernestina, Hilda y Noemí Trujillo Morales, quienes en la actualidad le brindan los debidos cuidados. Hace unos días, precisamente el día 3, su familia le preparó una gran fiesta y hasta mariachi le llevó para cantarle “Las Mañanitas”, digna a su persona, pues a un siglo de vida no cualquiera puede llegar.

Sin embargo, debido a la pandemia del Covid-19, sólo quienes viven con él lo festejaron, el resto acudió y desde fuera de su casa lo felicitaron.