Trabajadoras y trabajadores de la empresa Inverafrut de la localidad Chavarrillo, municipio de Emiliano Zapata, se mantienen en paro para exigir que les sean respetados sus derechos laborales y se les trate con dignidad.
Denisse Rodríguez recordó que desde el viernes sostienen esa manifestación, por lo que han recibido insultos por parte de los vigilantes y nula atención por parte del gerente Miguel Fernández.
Recordó que la inconformidad se dio porque los directivos intentaron “esconderlos” en el área donde guardan cartón a los más de 160 trabajadores, pues presuntamente una persona “importante” visitaría las instalaciones. Además dijo que trataron de negar que trabajaban allí diciendo que venían de Martínez de la Torre.
Queremos saber qué es lo que temen para que nos estén ocultando. Nosotros exigimos que nos den seguro, prestaciones de ley y derechos que todos los trabajadores merecemos. Si nos van a correr, aquí hay gente de mucha antigüedad, así que exigimos también nuestra liquidación
Precisó que aunque tienen hora de entrada no tienen hora de salida, por lo que es un trabajo arduo y de muy baja remuneración. A ello se suma que los obligan a acudir a limpiar todos los lunes sin recibir un pago extra por ello.
Nosotros traemos nuestros utensilios y venimos amenazados porque si no venimos a la limpieza no nos dejan trabajar, incluso un señor se cortó la mitad de un dedo al momento de venir a hacer limpieza y no se lo remuneraron ni le pagaron el tiempo que estuvo en cuarentena
Señaló que aunque ese problema tiene más de cuatro años, apenas se atrevieron a levantar la voz sin dejarse intimidar. Aunque la mayoría está en paro, dado que algunos trabajadores a quienes convencieron sus jefes sí están trabajando, la empacadora sigue operando.
Estamos aquí también esperando a ver si nos van a pagar la semana porque estamos pensando que quizá no quieran pagarnos, aunque desde el lunes estamos trabajando, el paro inició el viernes. Estamos exigiendo que nos paguen , añadió Fernanda, otra de las inconformes.
Señaló que constantemente les aplican descuentos injustificados de hasta 400 pesos sin explicarles la razón, lo que con su bajo salario es totalmente injusto.
Otra de las manifestantes acusó que recientemente tuvieron un empaque de Corea donde una caja de 40 libras la pagaban en 28 pesos y de 10 libras en 7 pesos; sin embargo, la de 40 libras les llevaba todo el día, por lo que no ganaban ni 30 pesos diarios.
Denunciaron que tienen herramientas inadecuadas para realizar su trabajo, además los jefes no se hacen responsables de ningún accidente dentro de sus instalaciones. Esas son apenas algunas de las anomalías, pues hay niños y niñas trabajando, así como mujeres embarazadas y personas de la tercera edad que no tienen ningún tipo de apoyo médico.
No hay ni siquiera medicamento para la presión, para el dolor de cabeza, alcohol ni nada, si algo le pasa a alguien tiene que correr, no es justo que nos tengan así, estamos cansados de esto. Ojalá que el gobierno nos apoye, alguien que no se venda porque todos los que han venido todos se han vendido y no es justo para nosotros , agregó Mayra, otra de las trabajadoras.
Incluso María Susana Bautista acusó que uno de sus tíos, Francisco, tuvo un accidente mientras realizaba la limpieza y pese a que perdió parte de un dedo lo intimidaron para decir que no se había lastimado en la empresa. Ahora sigue trabajando y sin indemnización alguna.
Nos quisieron intimidar y en el reporte clínico, porque yo no pude supervisarlo, decía que se había cortado con una cortadora de pasto, cuanto todos son testigos de que se lastimó con la máquina, y cuando los cuestioné dijeron que así se debía quedar
Advirtieron que no se moverán de ese sitio hasta que sus demandas sean atendidas y cuenten con condiciones dignas para laborar. Aunque el gerente se encontraba en la empresa y se le buscó para dar respuesta a las acusaciones de los inconformes se negó a dar entrevista.