El Consejo Político Estatal del Partido Acción Nacional determinó autorizar a su dirigencia estatal para que explore las posibles alianzas con otras fuerzas políticas.
Se trata del primer paso, al menos por parte del blanquiazul, para la integración de una alianza opositora en Veracruz.
Indica el acuerdo panista: “se autoriza a la Comisión Permanente Estatal a suscribir el convenio de coalición electoral que proponga el presidente del Comité Directivo Estatal con otros partidos políticos, excepto el partido Morena y sus partidos aliados para el proceso electoral local 2023-2024”.
Es el camino trazado para repetir la alianza de 2021 en Veracruz, cuando PAN, PRD y PRI fueron juntos a la contienda local en la entidad.
En esa ocasión, único antecedente de una coalición entre esas tres fuerzas políticas, en la contienda por las diputaciones locales la suma de los partidos opositores llegó al 30.8 por ciento de los sufragios totales, resultado insuficiente para alcanzar a Morena y aliados, que superaron el 41 por ciento.
La 4T aventajó por 370 mil votos a PAN-PRI-PRD.
En ese mismo proceso, pero en la contienda por las presidencias municipales, la suma de los votos alcanzados por panistas, priistas y perredistas se ubicó en poco más de un millón 126 mil sufragios, en tanto que la alianza Morena-PVEM-PT registró un millón 341 mil.
En esas elecciones locales veracruzanas, la diferencia entre la 4T y la oposición fue de sólo 215 mil votos. En términos porcentuales hablamos de 39.6 de Morena-PVEM-PT contra 33.2 por ciento de PAN-PRI-PRD; la diferencia fue de 6 puntos.
En el papel no parece una desventaja irremontable para la oposición.
Sin embargo, no se pueden reducir los escenarios posibles en un proceso electoral a los antecedentes inmediatos; los resultados de 2021 son un buen parámetro, pero difícilmente significan una tendencia. Habrá que ver cómo evolucionan las campañas presidenciales y cómo conectan con el electorado los candidatos a la gubernatura.
Hoy, prácticamente todas las encuestas consignan una clara ventaja para Morena y aliados; Consulta Mitofsky, por ejemplo, en la carrera presidencial ubica a Claudia Sheinbaum arriba del 56 por ciento en la intención del voto (datos de octubre), con lo que supera fácilmente a la aspirante opositora Xóchitl Gálvez. Muy atrás, Samuel García, con 11.5.
Lo mismo ocurrió en Veracruz en 2020, un año antes del proceso electoral de 2021, y el resultado terminó por cerrarse más de lo esperado.
En Veracruz la 4T ya tiene candidata, Rocío Nahle; la oposición se encuentra en este proceso pero antes de terminar el año se definirá el tema: Pepe Yunes será abanderado de PAN-PRI-PRD; y José Manuel del Río, si no surge una figura emergente, de MC.
Las encuestas y los resultados electorales recientes indican que Morena-PVEM-PT parten con ventaja en Veracruz, pero los próximos 7 meses no serán un día de campo para los candidatos del partido en el poder; de ahí el insistente llamado a la unidad interna en la 4T luego de que esta fuerza política atravesara por un desgastante proceso para definir candidatos.
@luisromero85
