/ lunes 15 de marzo de 2021

Pobres

El loable objetivo de reducir la pobreza y eliminar la desigualdad en este sexenio quedó como todo lo emprendido por el gobierno de Morena: un engaño. Los dos primeros años han sido económicamente terribles, pero socialmente devastadores. La riqueza promedio de cada mexicano, el PIB per cápita, ha retrocedido a niveles de vergüenza.

Morena subió el ingreso de los mexicanos al túnel del tiempo y lo llevó una década atrás. A fin del año pasado, el PIB per cápita se ubicó en los niveles de 2011, en el sexenio del aborrecido Calderón.

Y diez años de retroceso es, bajo cualquier óptica, mucho tiempo.

El ingreso promedio se ubica en 183 mil pesos. Esa es la medición técnica, pero tiene un problema: es falsa. Paul Krugman lo ha explicado muy bien. Si hay nueve mexicanos promedio en un café, el ingreso promedio es uno. Si entra a ese café Carlos Slim, el promedio sube exponencialmente.

Baste recordar, tan solo, que el año pasado entre 10 y 12 millones de mexicanos entraron a la pobreza. Compare: en 10 años, del 2008 al 2018, 2.9 millones entraron a la pobreza. Lo que padecimos el año pasado es una catástrofe. Son mexicanas y mexicanos que ganan menos de 40 pesos al día.

La gente está viendo que su ingreso se reduce o desaparece: es el fracaso central de un presunto gobierno de izquierda. Pero el de Morena ni es gobierno ni es de izquierda.

La riqueza de las familias se ha perdido porque se ha destruido el empleo de manera acelerada. Sólo el año pasado se perdieron 700 mil empleos formales y más de 5 millones informales.

La gente ha retirado 20 mil millones de pesos de sus afores: su salvavidas para la vejez. No fue la pandemia, es la ausencia de política pública.

El país que más rápidamente ha disminuido la pobreza en la historia de la humanidad es China. Ahí cada año salen de ella 11 millones: 800 millones en total en tres décadas.

No lo hicieron regalando becas, sino con reubicación geográfica, educación, salud, vivienda, vestimenta, alimentación, agua potable y electricidad. Y crecimiento económico. Mucho crecimiento. La economía pasó de representar el 1.5% mundial al 15%.

China no puso en el centro de su atención la pobreza. Puso al ser humano que la padece.

México ha crecido poco. Desde que Morena que llegó, simplemente dejó de crecer. Ahora dicen que el crecimiento no importa. Que tener trabajo es inútil. Que en la pobreza se puede ser feliz.

Hoy, Morena regala 191 mil millones de pesos. Dice, con cinismo, que refleja la gran vocación para aliviar la pobreza.

Pero, otra vez, tiene dos problemas. Primero: es una miopía. Sin empleo, vivienda, educación y salud, la gente jamás saldrá de la pobreza. Segundo: es falso. El gran programa social de Morena no es de su gobierno. Viene de afuera.

Los mexicanos migrantes en Estados Unidos mandaron el año pasado 903 mil millones de pesos a sus familias: más de 4 veces más que los programas de Morena.

Qué pena. Qué vergüenza. Dependemos de los que, un mal día, decidieron partir.

@fvazquezrig

El loable objetivo de reducir la pobreza y eliminar la desigualdad en este sexenio quedó como todo lo emprendido por el gobierno de Morena: un engaño. Los dos primeros años han sido económicamente terribles, pero socialmente devastadores. La riqueza promedio de cada mexicano, el PIB per cápita, ha retrocedido a niveles de vergüenza.

Morena subió el ingreso de los mexicanos al túnel del tiempo y lo llevó una década atrás. A fin del año pasado, el PIB per cápita se ubicó en los niveles de 2011, en el sexenio del aborrecido Calderón.

Y diez años de retroceso es, bajo cualquier óptica, mucho tiempo.

El ingreso promedio se ubica en 183 mil pesos. Esa es la medición técnica, pero tiene un problema: es falsa. Paul Krugman lo ha explicado muy bien. Si hay nueve mexicanos promedio en un café, el ingreso promedio es uno. Si entra a ese café Carlos Slim, el promedio sube exponencialmente.

Baste recordar, tan solo, que el año pasado entre 10 y 12 millones de mexicanos entraron a la pobreza. Compare: en 10 años, del 2008 al 2018, 2.9 millones entraron a la pobreza. Lo que padecimos el año pasado es una catástrofe. Son mexicanas y mexicanos que ganan menos de 40 pesos al día.

La gente está viendo que su ingreso se reduce o desaparece: es el fracaso central de un presunto gobierno de izquierda. Pero el de Morena ni es gobierno ni es de izquierda.

La riqueza de las familias se ha perdido porque se ha destruido el empleo de manera acelerada. Sólo el año pasado se perdieron 700 mil empleos formales y más de 5 millones informales.

La gente ha retirado 20 mil millones de pesos de sus afores: su salvavidas para la vejez. No fue la pandemia, es la ausencia de política pública.

El país que más rápidamente ha disminuido la pobreza en la historia de la humanidad es China. Ahí cada año salen de ella 11 millones: 800 millones en total en tres décadas.

No lo hicieron regalando becas, sino con reubicación geográfica, educación, salud, vivienda, vestimenta, alimentación, agua potable y electricidad. Y crecimiento económico. Mucho crecimiento. La economía pasó de representar el 1.5% mundial al 15%.

China no puso en el centro de su atención la pobreza. Puso al ser humano que la padece.

México ha crecido poco. Desde que Morena que llegó, simplemente dejó de crecer. Ahora dicen que el crecimiento no importa. Que tener trabajo es inútil. Que en la pobreza se puede ser feliz.

Hoy, Morena regala 191 mil millones de pesos. Dice, con cinismo, que refleja la gran vocación para aliviar la pobreza.

Pero, otra vez, tiene dos problemas. Primero: es una miopía. Sin empleo, vivienda, educación y salud, la gente jamás saldrá de la pobreza. Segundo: es falso. El gran programa social de Morena no es de su gobierno. Viene de afuera.

Los mexicanos migrantes en Estados Unidos mandaron el año pasado 903 mil millones de pesos a sus familias: más de 4 veces más que los programas de Morena.

Qué pena. Qué vergüenza. Dependemos de los que, un mal día, decidieron partir.

@fvazquezrig