Papantla, Ver.- De acuerdo con el director de la Unidad MédicaEspecializada en el Tratamiento de Adicciones en esta ciudad,doctor Javier Rocha Mota, “llegar a los once años de edad enadelante puede significar para muchos jóvenes el inicio de unaadicción, sin importar el género en el Totonacapan, ya que porcada siete varones, seis mujeres también se sumergen en eseconsumo de productos de fácil adquisición, debido a la falta deuna vigilancia adecuada tanto por parte de las autoridades, como delos mismos padres de familia”.

El entrevistado señaló que “durante este año fueronvisitados un total de 120 planteles educativos, desde preescolarhasta educación media superior, para llevar talleres y pláticas alos alumnos sobre el daño que ocasiona a la salud todo tipo de usode sustancias tóxicas”.

En estas tareas se involucraron tanto maestros y padres defamilia, pues es una tarea de corresponsabilidad para evitar quelos niños y los adolescentes caigan en las garras de lasadicciones del alcoholismo, tabaquismo y de cualquier tipo deestupefaciente.

Rocha Mota dijo que “también se dio atención médica aimportante número de adolescentes, entre hombres y mujeres,quienes presentaban problemas de alcoholismo y tabaquismo en dondelo bueno es que los padres de los pacientes se involucraron en esarehabilitación y eso mejora los resultados”.

Por ello “es importante el apoyo de los padres de familia,pues se pueden prevenir y ayudar a salir de las adicciones”, porlo que la atención se ha enfocado en ese sector de la población,porque es el más vulnerable.

Agregó que justo es en esta temporada decembrina, cuando esdifícil frenar el consumo de alcohol y cigarros y es preocupanteporque la adicción a esas sustancias se incrementa y cada díamás mujeres se suman a ese consumo, pues de cada siete hombres,seis féminas también padecen de ese problema y a pasovertiginoso, la edad se acorta, es decir, ahora niños de onceaños, ya han probado esos productos nocivos que por cierto, sonfáciles de conseguir y que afectan la salud, por ello esimportante que los padres de familia presten atención a sushijos”.