Parques como La Señoría y Alameda en la zona de las Ánimascarecen de mantenimiento, no sólo de jardinería, sino también dealumbrado público, basura, incluso existe maleza de podasanteriores, dieron a conocer usuarios.
Quienes utilizan esos espacios refieren que es necesario que sedé mantenimiento a estos lugares, pues hace 20 años eran parquesde extraordinaria belleza y hoy simplemente son espacios verdes,pero con tendencia a tener mayor maleza que vegetación agradable ala vista.
Aunque aún mantienen un aspecto agradable vecinos que losocupan refieren que hay necesidades y carencias que el gobiernomunicipal debe hacer frente, por lo que hicieron un llamado arescatar esos espacios que son públicos.
En el parque La Señoría el agua da una frescura y bellospaisajes, pero en otros como el Alameda la realidad es que sóloqueda un caño que atraviesa dicho lugar, incluso en algunas partesdespide un olor fétido.
LA SEÑORÍA
El parque La Señoría, ubicado en el fraccionamiento LasÁnimas, al final de la calle Paseo de Las Palmas y al cual locircundan calles como Leonardo Pasquel, Naranjos y avenida de LosMangos, goza de grandes jardines y una corriente de agua que iniciacon una cascada y aunque luego de esa caída de agua hay unaespecie de nata verde que impide ver el fondo, ésta se atora en elprimer puente por el cual las personas pueden atravesar al interiordel parque.
El descuido empieza desde ese primer puente, pues no sólo esque el adoquín se encuentre en mal estado, que incluso haya hoyosen éste o algunos pedazos del camino estén seriamente dañados,sino que hay tierra y arena de obras que se han realizado y ahíquedaron, pues no han sido retirados esos materiales.
Además son varias las personas que pasean con sus perros, otrasmás simplemente van a caminar y algunas otras se sientan en susbancas o en los aparatos de ejercicio para platicar con losamigos.
Julieta Zapata Arias, quien disfruta de este espacio, refirióque se trata de un parque familiar que recibe a muchos visitantessobre todo los fines de semana, pero le falta mantenimiento,empezando por las bancas que no están pintadas e incluso algunasestán grafiteadas, es una constante en todo el parque.
Expresó que no puede dejar de reconocer que ese espacio tienealgo de tiempo que no recibe mantenimiento y esto se puede notar enel estado de los senderos que antes eran mucho más aseados.Reconoció que la hojarasca puede ser de mucho beneficio para latierra y eso no lo duda, pero la realidad es que hay exceso dehojas y esto en vez de darle un beneficio da un aspecto sucio.
Expresó que considera que por ese parque no transitan muchaspersonas a pie y por lo general en la noche no camina por eseespacio.
Nelly León, vecina de la zona, refirió que el parque LaSeñoría es utilizado por muchas personas para hacer ejercicio,pero la realidad es que le falta mucha atención y mantenimiento,pues hay partes de mucho monte y el suelo está fuera de lugar,pues con el paso de los años el adoquín se ha desacomodado y estovuelve intransitable para algunas personas los andadores, sobretodo para personas con alguna discapacidad.
Al recorrer el parque se puede ver que éste luce en mejorescondiciones que el Alameda, sin embargo el mantenimiento sí esnecesario sobre todo en jardinería y mantenimiento de losandadores adoquinados, pues muchas piezas ya están fuera delugar.
Por lo demás el agua de ese espacio tiene vida, pues inclusohabitan en ese lugar patos y peces, además se pudo observar quehay alguien a cargo del mantenimiento de una parte del lago, pueshay una improvisada balsa con hojarasca, por lo que pudiera serutilizada para limpiar parte del lago donde termina esacorriente.
PARQUE ALAMEDA
El Alameda es un parque que se ubica en el fraccionamientoIndeco-Ánimas, en la calle Juan Sebastián Bach, Paseo de lasAraucarias y avenida las Jacarandas, pero además posee accesodesde las calles privada de Alameda, privada de Obelisco, calleCardenales y Alameda.
Este espacio también es conocido como parque El Guarache y esque algunos transeúntes contaron la historia de que este lugartoma ese nombre por un jardinero del lugar al cual los niños dehace 20 años apodaban el Huarache, aunque dicen desconocer sunombre real y también saben que le molesta ese apodo; refieren queeste personaje, quien vive al interior de ese parque, espantaba alos niños e incluso con el machete en mano para evitar que semetieran a los jardines, sin embargo reconocen que nunca le hizonada a algún niño y sólo era como su forma de evitar que sepisara el césped.
Varias fueron las personas que coincidieron que de ahí tomael nombre ese parque y es que la mayoría de quienes fueronentrevistados coincidieron en que lo conocen como el parque ElHuarache, sin embargo en la nomenclatura oficial se encuentra elnombre de Alameda.
Al recorrer ese espacio lo primero que se puede ver es el clarodeterioro en el que se encuentra y es que incluso algunos juegosinfantiles están fuera de su lugar, por lo que eso representa unpeligro para algún inquieto infante, pero además en el quiosco deese parque existe un nido de abejas las cuales al acercarsecomienzan a zumbar amenazantes y pueden ser de riesgo no sólo paraalgún menor, sino también para algún adulto.
También se pudo observar que hay basura en sus jardines, carecede limpieza e incluso hay una parte que es más maleza quejardineras.
Margarita Cervantes refirió que la casa al interior de eseparque es de quien se dedicaba a la jardinería del lugar ymantenía en buen estado ese parque, pero la realidad es que ya nolo hace, pues la edad de esta persona ya es avanzada.
Refirió que no saben cómo se llama el jardinero, incluso lacasa que hoy tiene se la mandó a construir la pasadaadministración municipal, pues refiere que ésta se incendióporque era una casita muy sencilla de madera y láminas decartón.
Reconocen que la edad de esta persona ya no le permite mantenerel parque en condiciones, por lo que solicitó que el Ayuntamientohaga lo necesario para enviar una cuadrilla y se apoye para que elparque se mantenga en condiciones para quienes lo visitan, puesincluso este lugar por las noches es muy oscuro.
“La persona a cargo está grande y barre por partes, pero noalcanza para limpiar todo y aunque el parque tiene luminarias laverdad estaría bien que hubiera más mantenimiento”,indicó.
Por su parte Angélica Hernández refirió que desde hace 33años que llegó a vivir a esa zona sabe que el parque no estabamunicipalizado y eso ha sido uno de los problemas y aunque existeuna persona para cuidarlo, la realidad es que se trata de un áreamuy grande.
Resaltó que hacía tiempo que no ingresaba al parque, pero porsalud empezó a caminar y ve con tristeza el parque, pues se tieneen abandono total de las diferentes zonas e incluso se acaban decortar árboles y los troncos los dejaron tirados.
Expuso que hace dos semanas acudió personal de municipio yquitaron árboles y ramas de algunas partes que dan al exterior yal interior pareciera se hizo lo mismo, pero la realidad es que yano se recogió nada y entonces el parque se ve en el abandonototal.
Dijo que como mujer sí le da miedo caminar por algunas partesde ese parque, pues hay muchas plantas de plátano y en lugar dedar sombra impiden ver quien se acerca o si hay alguienescondido.
Hizo un llamado a la Secretaría de Seguridad Pública para quepolicías de los que andan en bicicleta se dieran una vuelta porese espacio para reforzar e inhibir algún acto dedelincuencia.
Resaltó que ejemplo del abandono en el que está el parque ElHuarache son los arcos que están en diversos caminos de ese lugar,los cuales hace 33 años estaban cubiertos de buganvillas y hoysimplemente son varillas dobladas y que dan mal aspecto, pues nohubo quien cuidara las plantas.
“Hay mucho plátano que te tapa y no puedes ver si hayhierba y a pesar de eso muchas personas acuden a hacer ejercicio,pero hay partes donde sí te da miedo pasar”, indicó.
