A principios de octubre, las 12 mil plantas de flor de cempasúchil que se producen en el invernadero municipal de El Haya estarán listas para embellecer los parques y jardines de la ciudad durante la época otoñal de Todos Santos.
Desde hace 20 años, la “flor de muerto”, es cultivada en ese espacio; al inicio en pequeñas cantidades y ahora masivamente. La flor de Cempasúchil es originaria de México, su nombre proviene del náhuatl “Cempohualxochitl” que significa “veinte flores” o “varias flores”.
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Se sabe que nuestros antepasados asimilaban el color amarillo de la flor de cempasúchil con el sol, razón por la que la utilizaban en las ofrendas dedicadas en honor a sus muertos, tradición que se conserva hasta ahora.
El encargado del invernadero municipal del parque El Haya, Juan Álvarez Domínguez, explica que, aunque no requiere de muchos cuidados, sí tienen que estar muy pendientes de que no sean afectadas por las plagas. “La sembramos en junio, julio que es la época de poner a germinar la semilla y ya el envasado lo empezamos a hacer a principios de agosto para llevar una secuencia del desarrollo, fertilizaciones, fumigaciones y para esperar la temporada de Todos Santos”.
Don Juan refiere que, pese a que las plantas están dentro del invernadero, son muy atacadas por las plagas por lo que tienen que estar pendientes de las fumigaciones y fertilizaciones. “Ahorita estamos implementando fertilizar y fumigar con productos naturales, no usando químicos, es lo que ya no queremos porque aquí los químicos nos perjudican mucho por los gases, entonces vamos poquito a poquito quitándolos”.
Detalla que esa es una flor muy noble porque además de que no es caro producirla, embellece muchos espacios verdes de la ciudad. Así, para la época de Todos Santos, se podrán ver en el Parque Juárez, las macetas colgantes de Palacio Municipal, Ávila Camacho, la glorieta Rébsamen al inicio de la avenida Xalapa, Los Sauces y la entrada y salida de la ciudad.
Es bastante noble, pero sí hay que estar muy al pendiente de las plagas, porque sí la atacan como tres variedades
Para que las tres naves del Invernadero funcionen de manera óptima, son 10 las personas que están pendientes del cuidado y mantenimiento.
En Parques y Jardines, Álvarez Domínguez tiene 42 años trabajando; el invernadero tiene cerca de 20 años y desde entonces ha puesto todo su amor y energía en él.
En ese invernadero se producen todas las plantas que se siembra en las diferentes áreas verdes de la ciudad y que en este momento son cerca de 20 mil. “Entre pequeña, mediana y grande, un 40 por ciento ya para salida, la otra pequeña y la intermedia en desarrollo. Ahorita estamos con el cempasúchil porque se acerca la temporada de Todos Santos, pero también hay la más común que es la Belén, Elia, Vinca, Lavanda, Reina y una que otra suculenta”.
El área de Parques y Jardines ha tenido que luchar contra el robo de plantas de los espacios públicos. Incluso reconoce que no cultivan plantas “finas” porque desgraciadamente “desaparecen”.