Sequía, deforestación y la basura acaban con las pozas de Palo Gacho

Platos de unicel, vasos desechables, botellas de plástico y de cristal y hasta prendas de vestir, se encuentran esparcidas sobre los márgenes del río

Miguel Salazar

  · viernes 2 de agosto de 2019

Foto: Jaime Rivera

EMILIANO ZAPATA, Ver.- Las pozas de Palo Gacho han perdido volumen a causa de la falta de lluvias durante el último año y la deforestación. También se encuentran repletas de basura que, comúnmente, es dejada por turistas en cualquier momento y que atentan contra los ecosistemas, según vecinos.

Dicen que es preocupante la disminución del afluente, pues aunque del lado de las pozas más profundas hay "bastante agua acumulada", en otros puntos la disminución del cauce es notoria.

Al recorrer la zona del río fácilmente se pueden encontrar bolsas repletas de basura, algunas de ellas esparcidas, entre las que destacan platos de unicel, vasos desechables, botellas de plástico y de cristal, incluso algunas prendas de vestir. En el afluente también hay desperdicios que van acumulándose poco a poco entre las rocas.

Las pozas de Palo Gacho han sido un punto de reunión familiar y de entretenimiento para aquellos que les gusta convivir con la naturaleza.

El río cuenta con partes profundas que son aprovechadas por nadadores y clavadistas. "Es una pena que este lugar tan bonito se esté perdiendo por la falta de agua, la tala excesiva y la contaminación", dijeron Carmelo y Julián, quienes se echaban clavados en la poza más honda.

Sin embargo, en otros puntos donde se formaban unas pozas pequeñas, donde menores de edad podían nadar sin riesgos, el nivel del río ha disminuido notablemente, al grado de dejar rocas descubiertas y permitir atravesarlo caminando.

La cascada de Palo Gacho, aunque se ve con un gran volumen, ha perdido fuerza con el paso de los años, según los turistas que la recuerdan "más grande e imponente".

La vegetación es abundante y sirve como hogar de diversas especies como lagartijas, sapos, ranas, entre otras.

A un costado del afluente hay dos albercas o estanques vacíos, que comienzan a ser utilizados como tiraderos de basura.