Xalapa, Ver.- Tras darse a conocer los resultados del proceso de Ingreso 2018 a la Universidad Veracruzana (UV), 26 mil 180 bachilleres en Veracruz quedarán sin posibilidad de acceder a la educación superior pública y tendrán que buscar otras alternativas para continuar con su formación académica.
A pesar de que para algunos jóvenes aún existe la esperanza de ingresar mediante la lista de corrimiento que publica la propia UV o de obtener su ingreso en institutos tecnológicos u otras universidades, la gran mayoría tendrá que buscar alternativas en la educación privada, buscar trabajo un año o abandonar de manera definitiva sus aspiraciones universitarias.
INCERTIDUMBRE PARA MILES
En entrevista, Ragueb Chaín Revuelta, investigador de tiempo completo en el Instituto de Investigaciones en Educación de la Universidad Veracruzana, aseguró que el panorama para los egresados de bachillerato que no obtuvieron un lugar en la UV es muy complicado. Y es que dijo, aunque algunos podrían ingresar a los institutos tecnológicos y escuelas normales de Veracruz u otros estados, éstos son apenas el 10%, mientras que la gran mayoría tenían a la UV como primera y única opción para su formación universitaria.
Chaín Revuelta expuso la necesidad de que en la entidad se pueda lograr la aplicación de un examen único para la educación superior en donde se incluya a todas las instituciones públicas con el fin de lograr saber con exactitud cuántos jóvenes veracruzanos son rechazados anualmente y se quedan sin educación. “Suponemos que es un volumen interesante, pero no lo sabemos por lo que debemos trabajar para lograr una convocatoria conjunta entre instituciones que nos permita valorar en su justa dimensión cuántos se quedan sin esta oportunidad”, dijo.
Sin embargo, reconoció que el crecimiento exponencial del número de aspirantes y la falta de espacios en las diversas instituciones dejan de manifiesto que el estado le ha fallado a los jóvenes en su derecho de obtener educación gratuita y de calidad.
Lamentó que muchos preparatorianos tengan que insertarse en el mercado laboral mientras logran un lugar en la universidad y que muchos de éstos ya no vuelvan nunca a retomar sus aspiraciones profesionales. “Las condiciones económicas de la inmensa mayoría de la población en Veracruz va a dificultar a la posibilidad de acceder a la educación superior y hará que se integren al mercado laboral pero insisto, no tenemos dimensionado el volumen”.
El integrante del Instituto de Investigaciones en Educación apuntó que apenas unos cuántos jóvenes veracruzanos podrán acceder a la educación superior mediante escuelas particulares, aunque alertó que muchos de estos lo harán a través de instituciones “de dudosa calidad educativa”.
LAS PRIVADAS, OPCIÓN PARA UNOS CUANTOS
Para evitar que sus hijos pierdan un año de educación, familias veracruzanas realizarán sacrificios para que sus hijos puedan ingresar a una institución privada, sin embargo, los costos podrían causar afectaciones a su economía.
“Nosotros vamos a empezar a ver opciones porque la verdad es que parece poquito de mensualidad pero para una familia que va al día es mucho dinero, sobre todo porque son cuatro años y a eso se suma todo lo que se requiere ya en la escuela”, asegura Dolores Romero, quien ayer recibió la noticia de que su hija Cinthya no logró su ingreso a la UV. Detalló que aunque aún queda la posibilidad de que ingrese a la Normal Veracruzana de no obtener espacio en ninguna de estas instituciones sí tendrán que ajustar su presupuesto para que pueda ingresar a una universidad pública y aproveche el año en lo que puede volver a presentar examen en la UV
En Xalapa las mensualidades de las universidades privadas varían, sin embargo, en promedio oscilan entre los 780 a 8 mil 290 pesos, según la calidad e importancia que la institución. Aunado a este costo se debe considerar entre mil 200 y 10 mil 500 pesos de inscripción para los programas de licenciatura o ingeniería que se haya seleccionado, además del material, pago de cuotas extras e incluso hasta seguros médicos, credencial y otros costos.
Aunque no hay un dato exacto, existen al menos 30 universidades privadas que ofrecen una amplia variedad de licenciaturas e ingenierías en la capital del estado. Entre las carreras más demandadas se encuentra Derecho, Ciencias de la Comunicación, Comercio Exterior, Políticas y Administración Pública, Administración en Ciencias Aduaneras, Administración de Empresas Turísticas, Pedagogía, Diseño Gráfico, Arquitectura, Psicología, Administración de Negocios, Sistemas Computacionales Administrativos, Contaduría Pública, Informática, Trabajo Social, Gastronomía, entre otras.
