/ miércoles 21 de marzo de 2018

El pueblo espera que el nuevo gobierno sea mejor que el que se va

El periodo de gobierno de presidente de la República dura seis años, convertidos en 2 mil 191 días, que ahora con la reforma al artículo 83 de la Constitución Política federal, al entrar en funciones el relevo presidencial el día 1o. de octubre, reduce en dos meses el ejercicio presidencial de Enrique Peña Nieto.

Por tanto, para Peña Nieto desde hoy en adelante comienza la cuenta regresiva de los 193 días que restan para concluir su mandato, los cuales deberían ser aprovechados con la fórmula propuesta por AMLO de duplicar la jornada de trabajo de ocho horas diarias, para convertirlas en 16 horas de trabajo cotidiano y ocho horas para el descanso necesario de los seres humanos.

La prisa del gabinete presidencial por cerrar las cuentas del último año obedece a la incertidumbre del resultado en las elecciones del próximo 1o. de julio, debido a que aún siendo el relevo de la misma filiación partidaria se da el caso de exigir “cuentas claras” y aplicar la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos y, en algunos casos, la denuncia ante la PGR para que se integre la carpeta de investigación por los delitos cometidos por servidores públicos, tradicionalmente por desvío de recursos públicos, enriquecimiento ilícito, asociación delictuosa y ejercicio indebido de funciones públicas.

Por ello las prisas en el gobierno federal y en los estados donde habrá relevo de gobernadores, a partir de la elección del 1o. de julio próximo, la tarea primordial será el cierre anticipado de este ejercicio presupuestal, en el que contadores y auditores tendrán que trabajar al estilo López Obrador (16 horas diarias), para cuadrar las cuentas y entregar los remanentes a los relevos institucionales de la burocracia sexenal.

Los nuevos diputados y senadores que resulten favorecidos con el voto en la elección del actual proceso electoral deberán reunirse a partir del 1o. de agosto según lo dispone el artículo 65 de la Constitución Política de la República, en concordancia con el artículo 83 de la Carta Magna.

Con la asunción del nuevo Tlatoani de Los Pinos vendrá el ostracismo del presidente de la República que concluye su mandato. Y es sabido por los políticos profesionales que el poder se conquista y se ejerce en el cargo; pero cuando éste termina se acaba todo poder y el hombre político vuelve a pisar la Tierra como los demás. No en vano Maquiavelo sentenció: “El odio se gana tanto por las buenas obras como por el mal”.

��m�\u007f

El periodo de gobierno de presidente de la República dura seis años, convertidos en 2 mil 191 días, que ahora con la reforma al artículo 83 de la Constitución Política federal, al entrar en funciones el relevo presidencial el día 1o. de octubre, reduce en dos meses el ejercicio presidencial de Enrique Peña Nieto.

Por tanto, para Peña Nieto desde hoy en adelante comienza la cuenta regresiva de los 193 días que restan para concluir su mandato, los cuales deberían ser aprovechados con la fórmula propuesta por AMLO de duplicar la jornada de trabajo de ocho horas diarias, para convertirlas en 16 horas de trabajo cotidiano y ocho horas para el descanso necesario de los seres humanos.

La prisa del gabinete presidencial por cerrar las cuentas del último año obedece a la incertidumbre del resultado en las elecciones del próximo 1o. de julio, debido a que aún siendo el relevo de la misma filiación partidaria se da el caso de exigir “cuentas claras” y aplicar la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos y, en algunos casos, la denuncia ante la PGR para que se integre la carpeta de investigación por los delitos cometidos por servidores públicos, tradicionalmente por desvío de recursos públicos, enriquecimiento ilícito, asociación delictuosa y ejercicio indebido de funciones públicas.

Por ello las prisas en el gobierno federal y en los estados donde habrá relevo de gobernadores, a partir de la elección del 1o. de julio próximo, la tarea primordial será el cierre anticipado de este ejercicio presupuestal, en el que contadores y auditores tendrán que trabajar al estilo López Obrador (16 horas diarias), para cuadrar las cuentas y entregar los remanentes a los relevos institucionales de la burocracia sexenal.

Los nuevos diputados y senadores que resulten favorecidos con el voto en la elección del actual proceso electoral deberán reunirse a partir del 1o. de agosto según lo dispone el artículo 65 de la Constitución Política de la República, en concordancia con el artículo 83 de la Carta Magna.

Con la asunción del nuevo Tlatoani de Los Pinos vendrá el ostracismo del presidente de la República que concluye su mandato. Y es sabido por los políticos profesionales que el poder se conquista y se ejerce en el cargo; pero cuando éste termina se acaba todo poder y el hombre político vuelve a pisar la Tierra como los demás. No en vano Maquiavelo sentenció: “El odio se gana tanto por las buenas obras como por el mal”.

��m�\u007f