/ jueves 25 de junio de 2020

Iberdrola cancela inversión en Veracruz

Al iniciar julio de 2019, la española Iberdrola, empresa cuyo giro se enfoca en el tema energético, anunció importantes proyectos para México.

Eran tres plantas: una de ciclo combinado para Tuxpan, Veracruz; otra, de cogeneración, en San Juan del Río, Querétaro; y un parque fotovoltaico, en Puebla.

La inversión anunciada era cercana a 5 mil millones de pesos, que se suman a los recursos desplegados por la empresa en 13 entidades del país.

Iberdrola opera actualmente 15 centrales de ciclo combinado y de cogeneración; cinco parques eólicos y dos fotovoltaicos.

En mayo de 2019, la oficina de la Presidencia abordó el tema como un logro del actual gobierno, y se refirió a los 5 mil millones de pesos que invertiría Iberdrola en México, entre 2019 y 2024.

Ignacio Galán, cabeza de la empresa, sostuvo el año pasado una reunión con la Comisión de Energía en el Senado; en ese marco, habló de inversiones por mil millones de dólares en una nueva planta de ciclo combinado en Tuxpan.

El representante de la empresa dejó entrever lo que se veía como una muestra de confianza del sector en las decisiones de México en materia energética: “el Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador puede contar con una empresa como Iberdrola para que, a lo largo de este sexenio, apoye su Plan Nacional de Desarrollo...”.

Sin embargo, algo pasó en el último año en esa relación; el gobierno mexicano dio un viraje en su política energética; y el 17 de junio, el presidente López Obrador acusó a Iberdrola de orquestar una campaña mediática en su contra, que buscaría un cambio en las decisiones del gobierno.

La Federación decidió frenar las operaciones de nuevas plantas de energía, con el argumento de que representan una amenaza contra la confiabilidad del suministro eléctrico; ello habría representado la cancelación del proyecto de Tuxpan, de acuerdo con lo declarado por el alcalde del lugar, Antonio Aguilar Mancha, quien señaló que representantes de la empresa dieron a conocer que por la negativa de la Comisión Federal de Electricidad para otorgar el suministro de gas, no se concretaría la inversión en ese municipio.

Iberdrola ha evitado la confrontación con López Obrador; de hecho, la empresa donó material sanitario a diversos gobiernos estales, como Veracruz y Oaxaca; sin embargo, no falta quien señale que la declaración del edil tuxpeño fue armada por el consorcio español, para golpear al gobierno federal en su línea de flotación, sobre todo cuando la realidad económica de México, la generación de empleos y el sector empresarial atraviesan por una de sus peores crisis en la etapa contemporánea del país. Como sea, quien apuesta por esa versión difícilmente podría comprobarla.

Lo cierto es que si se concreta la cancelación de la inversión de Iberdrola, el gobierno federal y Veracruz recibirán un duro golpe. En el control de daños, el gobernador Cuitláhuac García anunció que el proyecto para Tuxpan se mantiene y que la CFE licitará la construcción.

Algo parecido ocurrió de forma reciente en Soledad de Doblado, donde había empresarios interesados en invertir tres mil 500 millones de dólares en una refinería con capacidad para producir 19 millones de litros de gasolina, turbosina y diesel, pero ante la incertidumbre sobre las decisiones del gobierno federal, determinaron dejar el proyecto para mejores tiempos.

Otro golpe más estaría en puerta en la zona de Perote, si es que debido a la política energética del gobierno federal, que privilegia el uso de combustibles fósiles sobre la generación de energías limpias, se suspende el proyecto de TW Solar. @luisromero85

Al iniciar julio de 2019, la española Iberdrola, empresa cuyo giro se enfoca en el tema energético, anunció importantes proyectos para México.

Eran tres plantas: una de ciclo combinado para Tuxpan, Veracruz; otra, de cogeneración, en San Juan del Río, Querétaro; y un parque fotovoltaico, en Puebla.

La inversión anunciada era cercana a 5 mil millones de pesos, que se suman a los recursos desplegados por la empresa en 13 entidades del país.

Iberdrola opera actualmente 15 centrales de ciclo combinado y de cogeneración; cinco parques eólicos y dos fotovoltaicos.

En mayo de 2019, la oficina de la Presidencia abordó el tema como un logro del actual gobierno, y se refirió a los 5 mil millones de pesos que invertiría Iberdrola en México, entre 2019 y 2024.

Ignacio Galán, cabeza de la empresa, sostuvo el año pasado una reunión con la Comisión de Energía en el Senado; en ese marco, habló de inversiones por mil millones de dólares en una nueva planta de ciclo combinado en Tuxpan.

El representante de la empresa dejó entrever lo que se veía como una muestra de confianza del sector en las decisiones de México en materia energética: “el Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador puede contar con una empresa como Iberdrola para que, a lo largo de este sexenio, apoye su Plan Nacional de Desarrollo...”.

Sin embargo, algo pasó en el último año en esa relación; el gobierno mexicano dio un viraje en su política energética; y el 17 de junio, el presidente López Obrador acusó a Iberdrola de orquestar una campaña mediática en su contra, que buscaría un cambio en las decisiones del gobierno.

La Federación decidió frenar las operaciones de nuevas plantas de energía, con el argumento de que representan una amenaza contra la confiabilidad del suministro eléctrico; ello habría representado la cancelación del proyecto de Tuxpan, de acuerdo con lo declarado por el alcalde del lugar, Antonio Aguilar Mancha, quien señaló que representantes de la empresa dieron a conocer que por la negativa de la Comisión Federal de Electricidad para otorgar el suministro de gas, no se concretaría la inversión en ese municipio.

Iberdrola ha evitado la confrontación con López Obrador; de hecho, la empresa donó material sanitario a diversos gobiernos estales, como Veracruz y Oaxaca; sin embargo, no falta quien señale que la declaración del edil tuxpeño fue armada por el consorcio español, para golpear al gobierno federal en su línea de flotación, sobre todo cuando la realidad económica de México, la generación de empleos y el sector empresarial atraviesan por una de sus peores crisis en la etapa contemporánea del país. Como sea, quien apuesta por esa versión difícilmente podría comprobarla.

Lo cierto es que si se concreta la cancelación de la inversión de Iberdrola, el gobierno federal y Veracruz recibirán un duro golpe. En el control de daños, el gobernador Cuitláhuac García anunció que el proyecto para Tuxpan se mantiene y que la CFE licitará la construcción.

Algo parecido ocurrió de forma reciente en Soledad de Doblado, donde había empresarios interesados en invertir tres mil 500 millones de dólares en una refinería con capacidad para producir 19 millones de litros de gasolina, turbosina y diesel, pero ante la incertidumbre sobre las decisiones del gobierno federal, determinaron dejar el proyecto para mejores tiempos.

Otro golpe más estaría en puerta en la zona de Perote, si es que debido a la política energética del gobierno federal, que privilegia el uso de combustibles fósiles sobre la generación de energías limpias, se suspende el proyecto de TW Solar. @luisromero85