El Tajín (Papantla), Ver.- Ubicada a siete kilómetros de Papantla y a 16 kilómetros de Poza Rica de Hidalgo, la zona arqueológica El Tajín es referente de visita obligada para el turismo estatal, nacional y extranjero.
Declarada Patrimonio de la Humanidad en 1992 por la Unesco, esta zona arqueológica recibirá al menos 20 mil visitantes durante la duración de Cumbre Tajín. Roberto Pérez García, representante sindical de los trabajadores de base adscritos a la zona arqueológica, dio a conocer que entre el viernes y sábado ingresaron alrededor de 4 mil visitantes.
Refirió que para este día y mañana lunes se prevé el ingreso de 5 a 8 mil personas por día. Mientras que para el martes el ingreso disminuirá a unos 2 mil turistas y para el día del equinoccio de primavera la cifra máxima registrada en los últimos dos años ha sido de 2 mil personas.
Recordó que el ingreso tiene un costo de 70 pesos, con la excepción del domingo en el que los mexicanos no pagan, además de que los menores de 13 años, adultos mayores y estudiantes con credencial vigente, y las personas con capacidades diferentes, entran gratis.
CIUDAD DEL TRUENO
Tajín significa Ciudad del Trueno en totonaco y su patrón arquitectónico consiste en edificios de base cuadrada o rectangular que tienen uno o varios cuerpos sobrepuestos, por lo que la zona se divide en subconjuntos.
La historia de este sitio y que se da a conocer en el mismo señala que su tamaño es de alrededor de 10 kilómetros cuadrados. Se refiere que su traza urbana fue planeada para definir un paisaje en el que espacios y alturas se distribuyeran según los grupos sociales, por lo cual los dirigentes ubicaron sus palacios, salones y edificios administrativos en el área más alta, llamada Tajín Chico, y coronaron su jerarquía con el edificio de Las Columnas.
La zona está rodeada por cuatro edificios, llamados 16, 18, 19 y 20, que fueron coronados por templos. La pirámide de Los Nichos es conocida también como El Tajín, pirámide de Papantla, de las Historias de los Siete y el Templo de los Nichos.
Asimismo se tiene un espacio especialmente construido para el juego de pelota, donde hay seis paneles tallados con escenas rituales y un friso ornamental que corre a lo largo de ambas paredes.