Mientras más avanza la pandemia, muchos en algún momento hemos sido “doctores certificados” a la hora de medicarnos por un simple dolor de cabeza, pero esta mala práctica nos pone en riesgo mortal, ya que estas sustancias si se usan a la ligera pueden desencadenar síntomas graves.
Aquí te hacemos una lista de lo que no debes tomar o combinar si deseas evitar una sala de emergencias, de acuerdo a los datos recabados del Departamento de Ciencias Biológicas de la Universidad Nacional de La Plata, Argentina.
Tomar aspirina y anticoagulantes: Seguramente has escuchado casos de gente que muere por hemorragias. En este caso la aspirina y los medicamentos anticoagulantes funcionan para evitar coágulos en la sangre o “aligeran” el flujo de este líquido en el cuerpo, por lo que el abuso puede provocar hemorragias internas.
Antidepresivos y analgésicos
Los analgésicos funcionan como sustancias que atacan o alivian los dolores en el cuerpo, ya sea por golpes musculares o cuidados después de una operación. Los antidepresivos funcionan (como su nombre lo indica) para aliviar problemas de tristeza y melancolía. Ambas son sustancias fuertes que en combinación pueden dañar el esófago y el estómago, además de provocar alza en ritmo cardiaco y, por supuesto, un infarto.
Ansiolítico y analgésico
Dos sustancias que atacan el dolor físico y emocional al mismo tiempo no parecen una buena idea, ¿verdad? El ansiolítico funciona para relajar a la persona, para calmar la ansiedad y para conciliar el sueño. El analgésico, como ya comentamos, alivia el dolor físico causado por lesiones en el cuerpo. Estos pueden provocar también aceleración en la respiración y el ritmo cardiaco, llevando al paciente a un ataque al corazón.
Antihistamínicos y jarabes o pastillas para la tos
Seguramente algún día se te combinó una alergia y una gripe o tos fuerte. ¿Combinar los dos?, mala idea. Los antihistamínicos sirven para controlar los problemas de alergia pero contienen elementos activos que son similares a los medicamentos para tratar las gripes, así que si estás pensando en curarte de forma más rápida, podrías padecer una sobredosis.
Los opioides y paracetamol
Los opioides son sustancias muy fuertes para calmar el dolor moderado o intenso. En el universo médico se usan para tratar a pacientes con cáncer o enfermedades terminales. Por otro lado el paracetamol también quita dolores más pequeños, y de hecho se recomienda cuando se padece Covid-19 ligero e incluso para tratar los efectos secundarios de la vacuna, sin embargo, la combinación de estos dos puede ser mortal para el hígado, pues este se encarga de eliminar toxinas y al recibir tanto podría tener daños irreversibles.
Así que si estás pensando en automedicarte, no lo hagas y recurre siempre a un profesional de la salud que seguramente te ayudará a tratar tu padecimiento y quizá sin necesidad de tantos fármacos.
