La Fiscalía General de la República (FGR) informó oficialmente que el “Rancho Las Mesas”, propiedad de Moisés “N”, acusado de delitos de asociación delictuosa y operaciones con recursos de procedencia ilícita cometidos en Veracruz, obtuvo en definitiva la declaratoria de abandono.
Por lo tanto las más de 90 hectáreas que se ubican en Valle de Bravo, Estado de México, que se encuentran rodeadas de bosques y lagos, con múltiples caballerizas y una lujosa mansión regresarán al pueblo.
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De acuerdo con el informe que brinda la FGR, el bien del que se obtuvo su propiedad definitiva, fue producto de dichos delitos y su declaratoria de abandono ha quedado firme, por lo que el inmueble será entregado al Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado.
Destaca que dicho inmueble le fue asegurado a Moisés “N,” quien cuenta con orden de aprehensión. Actualmente, se encuentra prófugo de la justicia y se le acusa de ser prestanombres del exgobernador de Veracruz, Javier “N”, durante su mandato, quien está preso.
Se sabe que la propiedad está en manos de la FGR, desde 2016 y es parte de las investigaciones de los presuntos actos de corrupción que cometió el exmandatario estatal.
Del 2016 hasta el pasado 15 de mayo del presente año, como procedimiento, la FGR, solicitó a cualquier interesado en reclamar las más de 90 hectáreas de bosques y lagos caballerizas y una lujosa mansión que comprobara su legítima posesión, sin embargo esto no sucedió, por lo que ahora será entregado al Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado.
Se sabe que Moisés “N”, acusado de los cargos de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita, el pasado año buscó un amparo en contra de la declaratoria de abandono, y expuso que no había sido notificado en su momento del proceso, sin embargo un juez federal rechazó su intento.
Ahora la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) estaría dando uso para la cría de caballos, lo que sería una inversión de cerca de 100 millones de pesos para criar más de 120 caballos al año.
Por lo tanto el inmueble ya no le pertenece a Moisés “N”, prófugo de la justicia; hasta el momento continúan las autoridades tras sus pasos.
