El intento de feminicidio existe, aunque es difícil para las víctimas acreditarlo ante un juez o jueza, pues los casos son regularmente clasificados como lesiones, lo que obstaculiza el acceso a la justicia y a vivir con tranquilidad. Así lo demuestra una revisión de las cifras consignadas en diversos informes de transparencia emitidas por autoridades de procuración e impartición de justicia en la entidad veracruzana.
En Veracruz, durante los tres últimos años, el Poder Judicial del Estado (PJEV) ha registrado 63 carpetas judiciales por el delito de tentativa de feminicidio y 597 por lesiones dolosas contra las mujeres. Asimismo, entre los años 2016 y 2021, el sistema judicial sumó 2 mil 785 carpetas de lesiones contra niñas, adolescentes y mujeres; mientras que en el mismo periodo registró 78 carpetas por el delito de tentativa de feminicidio.
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Por parte de la Fiscalía General del Estado (FGE), entre el año 2020 hasta el 7 de septiembre de 2022, contabilizó 7 mil 064 mujeres víctimas por el probable delito de lesiones dolosas.
A su vez, la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención Integral a Víctimas (CEEAIV), mediante oficio CEEAIV/207/2022, con fecha 28 de septiembre de 2022, reportó a través de la Subdirección de Atención Inmediata y Primer Contacto, que en el periodo 2020-2022, atendió 29 casos de tentativa de feminicidio o lesiones dolosas hacia mujeres.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) apunta que los feminicidios y la tentativa de éstos son reconocidos como crímenes de odio debido a que se dan en un ambiente de violencia, desigualdad, impunidad y considerados normales.
Asimismo se presume que hay tentativa o intento de feminicidio cuando una persona intenta quitarle la vida a una mujer por razón de género, o bien, cuando las lesiones dolosas ocasionadas a una mujer tienen algún precedente de violencia respecto del agresor. Sin embargo, las sobrevivientes de feminicidio enfrentan obstáculos para acceder a la justicia.
Uno de estos obstáculos denunciados por colectivas y organizaciones de la sociedad civil, tiene que ver con la reclasificación del delito de tentativa de feminicidio al delito de lesiones o violencia familia, por parte de las y los jueces.
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Uno de los casos documentados en la entidad es el que ocurrió en noviembre de 2021, luego de que un juez cambiara el delito de intento de feminicidio por violencia familiar, por un hecho registrado en diciembre de 2019, en la comunidad El Zapotal, municipio de Acajete.
Apenas el pasado mes de abril, la Cámara de Diputados aprobó la modificación al artículo 63 del Código Penal Federal donde se incluye la tipificación del feminicidio en grado de tentativa. Según lo expuesto, atender la tentativa de feminicidio como un delito punible permitirá al Estado ejercer una protección real y efectiva a las mujeres, no dejarlas en el desamparo de la justicia, mientras el agresor sigue libre.
