/ miércoles 19 de agosto de 2020

Caray, no se vale…

Buen día, apreciado lector. Por supuesto que Andrés Manuel López Obrador es un político diferente.

Esto lo ha confirmado ampliamente el hoy presidente de México, que con sus decisiones a estas alturas de su mandato tiene echando chispas a “los nostálgicos del poder” y a sus seguidores contra éstos.

Tratando de ver su actuación desde un punto de vista imparcial, se puede decir que hay muchísimas buenas acciones, entre ellas, aquí entre nos, de que se la roben los malos servidores públicos, dar la lana a los viejitos (aunque a muchos no les llega) y otras, que los que dicen que saben consideran muy malas.

Pero es indudable que el presidente de la República sigue obligado a corregir decisiones que, en lo más alto de la desfachatez y a conciencia plena de la corrupción asumida, incurrieron gobiernos priistas y panistas, que al final condujeron a la sociedad a echarlos del poder.

Este martes, en su conferencia mañanera, el presidente destapó otra gigantesca cloaca que seguramente llenó de indignación a los que lo vimos y oímos desde la comodidad de la camita hogareña.

Dijo que gracias al cambio en la Dirección de Puertos se acababa de enterar, ¡apenas este martes!, de la prórroga por 50 años otorgada por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) a la concesión de la Administración Portuaria Integral (Apiver), realizada en 2018.

Explicó que inicialmente se la habían concedido por 50 años —prefirió por ahora no decir los nombres de los accionistas—, pero que una vez que se supo que él ganó las elecciones, el gobierno de Peña Nieto le aumentó otros cincuenta años, ¡todo un siglo! Qué descaro.

“Por eso estamos poniendo orden en puertos, en aduanas, en migración, porque todo estaba echado a perder; corrupción por todos lados”, precisó y anunció que buscará corregir esa anomalía. ¿Cuántos casos semejantes más habrá por destapar?, caray, no se vale seguir soportando no solo a ratas, también a ineptos.

DE OTRAS COSAS

Saludos a Francisco Luis Sardiñas Salgado, quien una vez recuperado de un ligero malestar mantiene su interés en las actividades públicas. En Xalapa se le recuerda como un dinámico y buen servidor público, honesto y con gran prestigio. Dejó enorme y positiva huella en Protección Civil y otras tareas.

Tenga, lector, paz y armonía en su hogar. Cuidemos el agua y las plantas.

gustavocadenamathey@gmail.com

Buen día, apreciado lector. Por supuesto que Andrés Manuel López Obrador es un político diferente.

Esto lo ha confirmado ampliamente el hoy presidente de México, que con sus decisiones a estas alturas de su mandato tiene echando chispas a “los nostálgicos del poder” y a sus seguidores contra éstos.

Tratando de ver su actuación desde un punto de vista imparcial, se puede decir que hay muchísimas buenas acciones, entre ellas, aquí entre nos, de que se la roben los malos servidores públicos, dar la lana a los viejitos (aunque a muchos no les llega) y otras, que los que dicen que saben consideran muy malas.

Pero es indudable que el presidente de la República sigue obligado a corregir decisiones que, en lo más alto de la desfachatez y a conciencia plena de la corrupción asumida, incurrieron gobiernos priistas y panistas, que al final condujeron a la sociedad a echarlos del poder.

Este martes, en su conferencia mañanera, el presidente destapó otra gigantesca cloaca que seguramente llenó de indignación a los que lo vimos y oímos desde la comodidad de la camita hogareña.

Dijo que gracias al cambio en la Dirección de Puertos se acababa de enterar, ¡apenas este martes!, de la prórroga por 50 años otorgada por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) a la concesión de la Administración Portuaria Integral (Apiver), realizada en 2018.

Explicó que inicialmente se la habían concedido por 50 años —prefirió por ahora no decir los nombres de los accionistas—, pero que una vez que se supo que él ganó las elecciones, el gobierno de Peña Nieto le aumentó otros cincuenta años, ¡todo un siglo! Qué descaro.

“Por eso estamos poniendo orden en puertos, en aduanas, en migración, porque todo estaba echado a perder; corrupción por todos lados”, precisó y anunció que buscará corregir esa anomalía. ¿Cuántos casos semejantes más habrá por destapar?, caray, no se vale seguir soportando no solo a ratas, también a ineptos.

DE OTRAS COSAS

Saludos a Francisco Luis Sardiñas Salgado, quien una vez recuperado de un ligero malestar mantiene su interés en las actividades públicas. En Xalapa se le recuerda como un dinámico y buen servidor público, honesto y con gran prestigio. Dejó enorme y positiva huella en Protección Civil y otras tareas.

Tenga, lector, paz y armonía en su hogar. Cuidemos el agua y las plantas.

gustavocadenamathey@gmail.com