/ miércoles 4 de diciembre de 2019

Se impuso paridad de género en el TSJ

Consummātum est, que significa “todo está cumplido”, así rindió la protesta de ley la destacada abogada Sofía Martínez Huerta, quien fue electa presidenta del honorable Tribunal Superior de Justicia y del Consejo de la Judicatura del Estado de Veracruz.

Abogados litigantes y magistrados del propio tribunal aseguran la honestidad, preparación y experiencia en el ejercicio de la carrera judicial de la recién nombrada, por lo que se espera un brillante trabajo de la primera mujer que asume tan alta responsabilidad.

A su llegada al cargo la magistrada Martínez Huerta expresó el compromiso que todos esperaban, de que ajustará sus actos a la legalidad, sin permitir jamás la actuación arbitraria de quienes forman parte del Poder Judicial del Estado. En el ámbito jurisdiccional, la nueva presidenta del TSJE dijo que velará y exigirá que “no solo se administre justicia pronta, expedita, imparcial y gratuita, sino que sea oportuna, eficiente, eficaz y honesta”.

A tono con la política del presidente López Obrador insistió la magistrada presidenta en que todas las actuaciones de jueces y magistrados se ajustarán a las leyes, sin torcer la justicia mediante actuaciones arbitrarias y que será garante de la honestidad de todos los que trabajan en el TSJE para erradicar la compra de justicia, las gratificaciones y dádivas para recibir favores fuera de la ley.

Sobre los comentarios de magistradas y magistrados que han manifestado su inconformidad por el nombramiento de doña Sofía Martínez Huerta, hay que recordarles que la política es la ciencia de la paciencia y que si no les ha llegado su turno para ocupar la Presidencia del TSJE, tendrán que esperar y continuar con el dominio de la ciencia jurídica, parafraseando al exgobernador de Veracruz Javier Duarte de Ochoa.

En opinión personal de quien escribe esta nota, debo reconocer el gran valor de la colega recién nombrada, porque además de la dignidad con que llega, seguramente tendrá el temple que requieren los buenos impartidores de justicia, para poner orden en su propia casa, que de aquí en adelante será la sede del Poder Judicial del Estado.

Felicitaciones bien merecidas al magistrado Edel Humberto Álvarez Peña, cuyo legado en TSJE será reconocido por propios y extraños, como el principal impulsor de los juzgados microrregionales, la creación de las ciudades judiciales y la aplicación de la tecnología como instrumento de la justicia.

Consummātum est, que significa “todo está cumplido”, así rindió la protesta de ley la destacada abogada Sofía Martínez Huerta, quien fue electa presidenta del honorable Tribunal Superior de Justicia y del Consejo de la Judicatura del Estado de Veracruz.

Abogados litigantes y magistrados del propio tribunal aseguran la honestidad, preparación y experiencia en el ejercicio de la carrera judicial de la recién nombrada, por lo que se espera un brillante trabajo de la primera mujer que asume tan alta responsabilidad.

A su llegada al cargo la magistrada Martínez Huerta expresó el compromiso que todos esperaban, de que ajustará sus actos a la legalidad, sin permitir jamás la actuación arbitraria de quienes forman parte del Poder Judicial del Estado. En el ámbito jurisdiccional, la nueva presidenta del TSJE dijo que velará y exigirá que “no solo se administre justicia pronta, expedita, imparcial y gratuita, sino que sea oportuna, eficiente, eficaz y honesta”.

A tono con la política del presidente López Obrador insistió la magistrada presidenta en que todas las actuaciones de jueces y magistrados se ajustarán a las leyes, sin torcer la justicia mediante actuaciones arbitrarias y que será garante de la honestidad de todos los que trabajan en el TSJE para erradicar la compra de justicia, las gratificaciones y dádivas para recibir favores fuera de la ley.

Sobre los comentarios de magistradas y magistrados que han manifestado su inconformidad por el nombramiento de doña Sofía Martínez Huerta, hay que recordarles que la política es la ciencia de la paciencia y que si no les ha llegado su turno para ocupar la Presidencia del TSJE, tendrán que esperar y continuar con el dominio de la ciencia jurídica, parafraseando al exgobernador de Veracruz Javier Duarte de Ochoa.

En opinión personal de quien escribe esta nota, debo reconocer el gran valor de la colega recién nombrada, porque además de la dignidad con que llega, seguramente tendrá el temple que requieren los buenos impartidores de justicia, para poner orden en su propia casa, que de aquí en adelante será la sede del Poder Judicial del Estado.

Felicitaciones bien merecidas al magistrado Edel Humberto Álvarez Peña, cuyo legado en TSJE será reconocido por propios y extraños, como el principal impulsor de los juzgados microrregionales, la creación de las ciudades judiciales y la aplicación de la tecnología como instrumento de la justicia.