Gregorio Trejo cuenta con una vasta trayectoria, lo mismo como docente que como creador escénico, iluminador, gestor cultural e impulsor de la formación de nuevos públicos para la danza contemporánea y el teatro en México.
Quien ha fungido como director de universidades y jurado de programas estatales y federales está en Xalapa, ciudad a la que, asegura, le guarda mucho afecto porque en ella tuvo oportunidad de crear y desempeñarse como profesor en la Universidad Veracruzana.
Su breve estancia obedece al estreno de una pieza de arte escénico, Pórtico Lunar, en la que habla de cómo la luna puede convertirse en un abismo, en una entrada a un mundo de reflexión.
En entrevista con Diario de Xalapa, contento y siempre con mucho que decir, Gregorio Trejo cierra los ojos por unos instantes para ubicarse en su casa, cuando de noche, logra ver por la ventana la luna, que lo motiva a pensar en lo que es la vida, a ir al pasado o al futuro con la misma rapidez con la que parpadea. Considera que esto no sólo le sucede a él, por eso trasladó a una de sus creaciones esta situación, que en escena es interpretada por José Manuel Acosta, Karime Chan, Erubiel Cruz, Patricia Ramírez y Federico Ortiz. También están como invitados Jaqueline Cázares, Joaquín Montelongo y Paloma Pintle.
En la función programada para mañana a las 17 horas, en el teatro J.J. Herrera, se podrá conocer dos obras más, Club del tejido, que ahonda en la vida, el amor y la muerte, pero con un enfoque en el adulto mayor, y Frontera Blanco, en la que también manifiesta su interés por la muerte, “a ese límite en el que te despides de un ser querido y no sabes hacia dónde vas”.
El director de la Compañía Último Tren Danza-Escena reafirma con estas entregas su gusto por estar cerca del público y brindarle piezas que le comuniquen algo, no generarle al espectador preguntas acerca de qué es lo que hacen los intérpretes, por qué se mueven de determinada manera o por qué el discurso es tan abstracto.
Sin caer en complacencias, Gregorio Trejo declara que para él es muy importante el acto de compartir lo que hace y, como lo ha afirmado en otras ocasiones, no olvidarse del público ni de la raíz del arte, que es comunicar.
DANZA EN MÉXICO
Al hacer un breve análisis del estado actual de la danza contemporánea en México, opina que la comunidad no tiene parangón con la de teatro o música. “Es muy pequeña. Seguimos siendo muy pocos, pero quizá los números no son importantes; sí lo es la manera en la que nos involucramos los unos con los otros, en cómo creamos y qué creamos, la manera en la que generamos vínculos y cómo atendemos al poco público que hay”.
De los bailarines puntualiza que además de la técnica y la emotividad, deben tener sentido común –entendido éste como hacer bien lo que se tiene que hacer y entenderse como parte de una colectividad–.
Con respecto al cambio de administración federal y de las necesidades que enfrenta el sector, expresa que hay muchas líneas que hay que trabajar, pero destaca la importancia de fortalecer las redes y vínculos ya existentes. Por otro lado, piensa que existe la necesidad de cambiar la idea de sólo estirar la mano para pedir recursos: “también hay que analizar qué se está haciendo de manera individual y cómo se está trabajando”.
Gregorio Trejo agradece en ese sentido a Último Tren Danza-Escena, que funciona en Xalapa y en la Ciudad de México.
“Quienes son parte de esta compañía son personas que suman, que jamás restan. Y aunque un artista debe buscar tener una vida digna por su trabajo, los vínculos con esta agrupación van más allá del dinero”…
Para conocer la trilogía de la muerte, vista no desde una mirada trágica, la invitación queda hecha. La cita es en el teatro ubicado en Miguel Palacios número 12, centro histórico de Xalapa.
