Boca del Río, Ver.- Aunque no ha dejado de ver prácticamente nada de su estrategia de cara al duelo ante Santos, el técnico chileno Juvenal Olmos prepararía cambios para el próximo domingo cuando salten a la cancha del estadio Territorio Santos Modelo.
Hasta ahora el único movimiento que podría estar confirmado es el regreso del zaguero Osmar Mares, quien se recuperó de sus problemas físicos y ya ha trabajado al parejo de sus compañeros.
Ante la suspensión de Luis Caicedo, Rodrigo Noya estaría regresando a su posición de defensa central y su lugar como volante de contención lo ocuparía Antonio Martínez.
Olmos también planea darle continuidad al veracruzano Ronaldo Prieto, aunque al final podría mandarlo al banco de suplentes, pues con el regreso de Mares, el chileno Bryan Carrasco pasaría a jugar la posición de volante por derecha acompañando en labores ofensivas a Adrián Luna.
Esta situación se despejaría más tarde en el trabajo de futbol a puerta cerrada que sostuvo el equipo este mismo jueves en la segunda sesión de entrenamiento del día.
Hasta ayer, el atacante argentino Lautaro Rinaldi, quien se recupera favorablemente de sus problemas físicos, no había sido registrado ante la Liga MX, por lo que si el día de hoy no cumple con el trámite, quedará nuevamente descartado para el juego ante Santos.
El equipo se entrenó en un primer turno la mañana de este jueves en las instalaciones del estadio “Pirata” de la Fuente, con la idea de llegar en buena forma al duelo ante el conjunto lagunero.
Mientras los jugadores de campo trabajaron aspectos de definición frente al marco, los porteros del plantel se pusieron a las órdenes de Mario Rodríguez y cumplieron con un circuito de ejercicios en los que se buscó tener a punto los reflejos y las reacciones, además de ensayar los lances hacia los costados.
La sesión de entrenamiento inició con acondicionamiento físico con el balón bajo la supervisión de los preparadores físicos Marcelo Cabeza y Omar Altamirano.
Más tarde, divididos en dos grupos, los jugadores continuaron con la práctica.
El primer contingente se ubicó en un cuarto de cancha para hacer futbol en espacios reducidos, dinámica enfocada en la posesión del balón y la precisión a la hora de dar pases.
Mientras tanto, el segundo grupo se plantó de cara a una portería y perfeccionó los centros desde las bandas, los remates dentro del área, además de los disparos al marco en corta y larga distancias.
Una vez que todo el plantel cumplió con ambas dinámicas se dio por terminada la primera sesión del día.