La rehabilitación física es muy importante debido a que es un conjunto de actividades que está enfocada a mejorar el funcionamiento y reducir afecciones de salud que pueden presentar las personas ya sea por distintas circunstancias.
Dicho de otra forma, la rehabilitación ayuda a mejorar las condiciones de cada individuo, tratando principalmente las dolencias o enfermedades para que pueda recuperarse ante las dificultades que presente como el desplazamiento, entendimiento, alimentación, etc.
La rehabilitación puede ser requerida en cualquier momento debido a un accidente que tenga como consecuencia una lesión, enfermedad o cuestiones que tengan que ver con la edad y que dificulten, en cierta medida, el funcionamiento diario de la persona.
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¿Qué lesiones o enfermedades podrían requerir rehabilitación?
De acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) cerca de 2400 millones de personas presentan alguna afección que requiere y es beneficiada por la rehabilitación. El mismo informe señala que varios países donde cuentan con menos capacidad de ingresos, más del 50 por ciento de las personas no reciben algún servicio de rehabilitación, lo que termina afectando y prolongando su afectación.
Entre las lesiones o afectaciones se encuentran:
- Dolores crónicos como dolor de espalda o cuello
- Quemaduras graves, amputaciones o cirugías mayores
- Trastornos del habla o dificultades para comunicarse
- Trastornos genéticos
- Trastornos del desarrollo
- Discapacidad intelectual, entre otras
¿En qué consisten los tratamientos?
La rehabilitación física puede ayudar a recuperar muchas funciones del cuerpo, incluso problemas intestinales y de la vejiga, masticación e ingestión, problemas de pensamiento o razonamiento, movilidad, habla y lenguaje. La rehabilitación física puede brindarse dentro de un hospital, en una clínica o consultorio, o incluso en el domicilio del paciente.
Los tratamientos dependerán mucho de los objetivos y las condiciones de cada persona aunque en general, se usan exámenes para evaluar los problemas que se presentan para llevar un control de la recuperación, así como ver su avance.
Los tratamientos dependiendo el caso, pueden consistir en:
- Apoyo psicológico para personas con problemas de depresión
- Fabricación y ajuste de prótesis para mejorar la movilidad de personas que lo requieran
- Ejercicios que ayuden a mejorar movimientos, problemas al hablar
- Prescribir medicamentos para niños con parálisis cerebral y contribuir a a reducir la rigidez muscular
- Ayuda con sillas de ruedas, férulas u otro equipo médico
- Tratamientos para restablecer funciones del cuerpo
