Veracruz, Ver.-Militantes del PRI en Veracruz denuncian que el edificio del comité municipal en esta zona tiene un adeudo de casi un millón de pesos en energía eléctrica y más de 50 mil pesos en agua, lo que podría complicar la renovación de la dirigencia.
Según presidentas seccionales de este partido, las instalaciones del PRI ubicadas en la calle de Netzahualcóyotl 2497 llevan más de un año cerradas y las deudas en servicios se fueron acumulando.
Señalan que durante la pasada administración encabezada por Carlos Alberto Troncoso el partido enfrentó la peor crisis económica y sin recursos para pagar la nómina de empleados se tuvo que despedir a todos y se les quedó a deber varias quincenas.
Del dirigente, nombrado por el entonces presidente estatal Marlon Ramírez, no se volvió a tener registro de actividad y el edificio fue cerrado, acumulando deudas.
Guadalupe Ochoa Candiani, presidenta de la CNOP en Veracruz, explicó que tan sólo por energía eléctrica el edificio está pisando el millón de pesos mientras que por agua la deuda es de 60 mil pesos.
Algunas de las militantes se han organizado para limpiar sus instalaciones de vez en cuando en espera de que ya con candidato oficial del Frente Amplio el partido se ponga a trabajar y se abran las instalaciones.
Sin embargo hay mucha preocupación entre la base del PRI porque estos adeudos podrían afectar la renovación de la dirigencia, pues hasta el momento nadie ha alzado la mano para postularse, pese a las especulaciones.
Mientras tanto en el PRI de Boca del Río, hace un par de semanas se llevó el proceso de renovación, donde por designación de la dirigencia estatal llegó Julio César Cerecedo Aguilar quien es un abogado de profesión que desde su juventud milita en el tricolor y ha sido coordinador de delegados, ha participado en campañas y fungió como funcionario en la dirección de Tránsito.
Su llegada no fue bien por algunas de las presidentas seccionales quienes junto con el presidente estatal de la Red de Jóvenes salieron a pedir su renuncia.
Luis Fernando López Lara, presidente de la Red de Jóvenes por México, consideró que la llegada de Cerecedo Aguilar se trataba de una imposición y lamentaba que su partido estuviera manejando mediante prácticas de imposiciones y dedazos y que no se abran al diálogo y a la democracia.
Explicó que no hubo convocatoria para la renovación del comité municipal y por imposición llegó Julio Cerecedo Aguilar que a su parecer se trata de una persona ajena a Boca del Río que no ha caminado ni trabajado con las bases del partido.
Sin embargo, la Red Nacional de Jóvenes a través de un comunicado puso en claro que las declaraciones del boqueño eran a título personal y que ya no pertenecía al organismo político.
Cabe destacar que el municipio de Boca del Río se conforma por 90 seccionales del PRI mientras que en Veracruz el número asciende a 300, que representan la base del partido
