Boca del Río, Ver.- A bordo de la Osa Viajera y con el emblema “viajamos para dejar de soñar y vivir un sueño”, Sergio y Alejandra dejaron todo en su natal Aguascalientes para iniciar una aventura yendo de un lugar a otro y que esperan continuar en los próximos 10 a 15 años.
En su pequeña casa rodante, Sergio Armagnac López y Alejandra Luevano de la Torre de 44 y 40 años respectivamente, partieron junto con su perrita “Dolly” desde octubre del 2021 de Aguascalientes persiguiendo el sueño de viajar y explorar todos los rincones de México y otros países del mundo.
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Su historia juntos la iniciaron cuando ambos se desempeñaban como profesores de arte en una escuela de Aguascalientes y más tarde se lograron emplear en otros trabajos; el último fue como comerciantes de aguas frescas.
“La pandemia nos hizo recapitular acerca de nuestras vidas, que era lo que queríamos, los últimos cuatro años trabajamos en nuestro propio negocio de aguas de frutas naturales pero teníamos esa sensación de viajar, de conocer el mundo y fue cuando salió la idea de empezar el viaje a bordo de nuestra casita rodante, dejamos todo en Aguascalientes, vendimos nuestra casa, nuestras cosas y aquí estamos”, expresó Sergio con mucho entusiasmo.
¿Qué sitios visitaron primero?
Su primera aventura inició en Costa Pacifico hasta Nayarit con rumbo a Michoacán donde pudieron conocer la tradición de muertos en Pátzcuaro, después regresaron a Zacatecas y han pasado por Manzanillo, Colima, Guadalajara, Salamanca, Querétaro, Hidalgo, Tlaxcala visitando ciudad en ciudad hasta llegar a Boca del Río donde permanecerán dos días y continuarán su viaje rumbo al sur, el objetivo es que en tres años lleguen a Argentina.
El trayecto los mantiene emocionados por lo que sin dudar expresan que ha sido la mejor aventura y que para nada se arrepienten de haber dejado su vida de antes.
“Dejamos casa, coche, lo que teníamos de nuestro negocio todo y hoy día esto es lo único que tenemos, pero no nos arrepentimos, es la mejor decisión que hemos tomado y la volveríamos a hacer muchas veces, por el momento no tenemos planes de establecernos por los próximos 10 a 15 años no”, sonríen ambos.
¿Cómo se hicieron de su casa rodante "Osa Viajera"?
A su Osa Viajera como llaman a su casa rodante le han invertido casi medio millón de pesos, desde la compra de la unidad hasta los arreglos que les han permitido viajar cómodamente, preparando sus alimentos en su cocineta, asearse en el baño, dormir plácidamente en una cama con ventilador a base de energía solar y conocer de la gente y las tradiciones de cada lugar en la que han estado.
“La casita se ha hecho en tres etapas, cuando vendimos nuestra casa solo pudimos instalar la cama pero en el camino fuimos haciendo los arreglos, hicimos una extensión atrás y contamos con cocineta, baño, una alacena muy bonita, todo lo hemos armado con nuestras propias manos, aún nos faltan cosas”, señalan
Para financiar su viaje, ambos elaboran artesanías para venderlas de ciudad en ciudad, pero también utilizan sus perfiles de redes sociales para crear contenido que pueda monetizar, la ciudadanía los puede encontrar como “Ale y Sergio”.
“Como muchos viajeros salimos con nuestros ahorros, después conocimos a uruguaya que nos enseñó a diseñar artesanía y también estamos tratando de ser nómadas digitales, nuestro interés es vivir digitalmente, esperamos que las redes sociales nos ayuden a generar ingreso”, explica.
La pareja de esposos comenta que en la actualidad cada vez hay más mexicanos que como ellos se arriesgan a vivir la aventura de viajar por el mundo a bordo de sus casas rodantes.
Finalmente aclaran que en estos 15 meses que han viajado por carreteras libres no han sido víctimas de ningún delito y que por el contrario se han encontrado con buenas autoridades y buenos ciudadanos.
