Luego de perder la vista completamente a los 11 años, a Ana Paola Morgado Luna, quien actualmente tiene 16 años, le interesa crear campañas, eventos y contenido que llegue a concientizar y sensibilizar a la sociedad y principalmente a los jóvenes. Actualmente es estudiante de sexto semestre en la preparatoria y bachillerato en línea de Veracruz (Belver), el año próximo presentará examen en la Universidad para estudiar ciencias políticas, donde espera encontrar las condiciones adecuadas.
Entrevistada luego de anunciar el programa Sentidos, que se llevará a cabo el 3 de diciembre en el patio del palacio municipal para conmemorar el Día Internacional de las Personas con Discapacidad explica que adquirió la discapacidad a los 11 años, puesto que antes era de baja visión, con 60 por ciento de ésta, fue ese cambio lo que la motiva a seguir creando espacios y darse cuenta del abismo que existe entre no tener una discapacidad y tenerla, con todas las implicaciones que se suman.
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“Me di cuenta que no debería ser así, tener una discapacidad no debería representar que tus sueños se acaben, que te desmotives, justamente de esto nace querer hacer cosas para que jóvenes con discapacidad que vienen en camino, niños y niñas se den cuenta que sí se pueden hacer las cosas”, así como que los jóvenes sin discapacidad conozcan estos temas y que podamos tener una sociedad inclusiva, puntualiza.
La creadora de la marca Paola_enbraille, considera que el elemento principal para estudiar teniendo una discapacidad es el interés, aunque los maestros no han sido capacitados en el sistema braille, ni hablar de lengua de señas mexicana, tampoco hay muchos libros en braille, algunos están de manera digital, pero no es fácil acceder a ellos.
Insiste que lo principal en el proceso de aprendizaje es tener el interés de involucrarte, de acercarte a rehabilitación, de preguntar a los padres de familia, de crear el triángulo de familia, docentes y alumnos con discapacidad para que lo que se haga sea funcional. “Si no está la capacitación integralmente cuando se tiene un alumno se debe preocuparse por tenerla”.
Llama a las autoridades a empatizar con las personas, acercarse y convivir con las necesidades que realmente tienen en cuanto a estructuras, inclusión laboral e invertir en ellas y ellos; realmente se puede invertir en su potencial, en sus capacidades y en lo que pueden dar como seres humanos.
A las personas con discapacidad, niños y niñas que vienen detrás de ella, les invita a estar motivados, a saber que sí se puede, que hay personas trabajando para que sean reconocidos, respetados, valorados y que asimismo sean agentes de cambio también para quienes vienen atrás de ellos.
Concluye que siempre le han gustado las ciencias políticas, por lo que el próximo año presentará examen de admisión en la Universidad Veracruzana, donde espera tener las condiciones para presentar su examen, así como que la institución a la que decida ingresar le ofrezca las condiciones para llevar a cabo sus estudios.