Tiene razón Hipólito Deschamps Espino Barros, alcalde de Medellín de Bravo, cuando presume que vale la pena hacer una inversión de 100 mil pesos para obtener 70 millones.
El munícipe afirma lo anterior en la réplica que envió a Diario de Xalapa con relación a la nota titulada: "Edil gasta en viajes; Medellín en pobreza", publicada en la edición del pasado día 17.
En el texto de su comunicado, que pretende hacer las veces de aclaración a lo publicado enfatiza que volvería a hacer esos viajes siempre y cuando con ello se pudieran conseguir otros 70 millones de pesos para realizar obras, "claro que lo volvería a hacer”.
Abunda e insiste en que "Gracias a esos viajes es que se pudo conseguir una inversión histórica para nuestro primer año de gobierno”, y enlista tres de los proyectos de mayor importancia.
Sólo para medir lo “invertido”, hay que apuntar que en uno de esos viajes de tres días a la Ciudad de México, Hipólito gastó del 17 al 19 de diciembre del año pasado, 43 mil 247.52 pesos. Esta “inversión”, como él la llama, incluyó bebidas y alimentos en el hotel Hyatt Regency por 18 mil 257.51 pesos; en Rosa Negra Latin American Cuising pagó por comida 4 mil 745; en Servicios Aeroportuarios Gourmet S.A de C.V facturó 509.01, y en gastos en el servicio de Aeroméxico desembolsó 18 mil 284 pesos.
En otro de sus viajes a Puebla y Xalapa, que realizó del 13 al 19 de septiembre del mismo año, las arcas municipales cubrieron 10 mil 296.05 por hospedaje en el Hotel Holyday Inn y en el Presidente Intercontinental Puebla.
La información publicada por el Vocero de la Provincia también revela gastos del secretario particular del alcalde, tema al que no aludió en la réplica.
Resulta que la Tesorería municipal de Medellín erogó 45 mil 601 pesos, en el periodo del 6 de agosto de 2018 al 1 de enero de 2019, por concepto de viajes de Gabriel de Jesús Cárdenas Guízar, quien como secretario viajó para hacer “gestión de recursos”.
En un solo día, el 6 de agosto de 2018, el tesorero Héctor Alejandro Páez Guerrero erogó 10 mil 130.01 pesos por servicios de Aeroméxico y por el hotel Camino Real.
En otro viaje de “comisión a la Ciudad de México”, el 11 de octubre de 2018, el secretario particular gastó 8 mil 275 pesos, sin acompañantes, para comer en restaurante 1857 y Rosa Negra Latin America Cuising.
También en un día, el 8 de noviembre del mismo año, Gabriel Cárdenas gastó 12 mil 808 pesos en comidas y hospedaje.
Y así continúa el rosario de detalles sobre gastos de viajes del alcalde y varios de sus colaboradores que se sacrifican haciendo gestiones para su pueblo y también reportan gastos sin comprobantes, como los 4 mil 506 pesos que le cargó al erario municipal el secretario particular el 1 de enero pasado cuando viajó a Ciudad México.
Es evidente que los funcionarios de Medellín no se tratan mal cuando viajan y también queda de manifiesto que a ellos no los limitan las normas sobre viáticos cuando se trata de dinero público.
Qué bueno que se trata de una “inversión” y qué ﷽﷽﷽﷽﷽﷽﷽﷽trata de ina invesricalde y sus bueno hay resultados concretos, pero ante las condiciones actuales de pobreza y ante lo limitado de los recursos oficiales, resulta excesivo el gasto de 43 mil pesos en tres días.
El uso del dinero público está reglamentado y todos los funcionarios de todos los niveles de gobierno están obligados a respetar los límites establecidos, sin importar si el dinero se aplica en una inversión como la que argumenta Hipólito Deschamps, quien debería cuidar tanto los niveles de gastos que hace en esos viajes, como su declaración de que lo volvería a hacer.
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