Más allá de quienes ganaron ayer las elecciones extraordinarias en tres municipios veracruzanos, vale destacar que no se hizo realidad ninguna de las premoniciones catastrofistas que hicieron algunos de los contendientes y directivos partidistas, quienes advirtieron del riesgo de enfrentamientos, entre otras cosas.
Hubo, eso sí, acusaciones, denuncias, declaraciones y quejas de una elección de estado, de acarreos por parte de una y otra coalición, gritos y aspavientos entre quienes se reprochaban la supuesta compra y coacción del voto.
Por lo pronto, el PREP indicaba anoche que Guadalupe Ameca, de PAN-PRD, llevaba ventaja en Camarón de Tejeda. Que en Emiliano Zapata el virtual ganador fue Jorge Mier, de Morena, y que en Sayula de Alemán también aventajaba el candidato de la coalición PAN-PRD Fredy Ayala González.
El desarrollo de los comicios de ayer tuvo, además de ciudadanos votando, algunos jaloneos y gritos, como ocurrió en una de las casillas del fraccionamiento Bugambilias, de Las Trancas, donde unos y otros se hicieron acusaciones y se gritaron.
El resto de la jornada se distinguió por las “incidencias normales” y ahora lo que sigue es esperar que el cómputo confirme la ventaja que le daba anoche a los virtuales ganadores o que cambie esa tendencia.
Y lo que sigue también es que los partidos y sus candidatos se preparen para la elección del primero de julio cuando buscarán ganar la presidencia de la República, la gubernatura, el Senado, las diputaciones federales y las locales.
Si como algunos consideran que lo ocurrido ayer es el preámbulo de lo que puede pasar en el proceso electoral ordinario que ya está en marcha, estaríamos entonces ante un cercano mes de julio relativamente tranquilo y sin mayores problemas de violencia electoral.
Lo que sí sería de desearse y esperarse es que los ciudadanos acudan a votar con pleno conocimiento de lo que les propone cada candidato y que decidan hacerlo conscientes de que sufragarán por el que haga las mejores propuestas y esté mejor preparado para enfrentar los problemas del país.
Hace unos días abordamos el tema del Tribunal Electoral de Veracruz y de la resistencia de su presidente José Oliveros Ruiz para dar a conocer la situación que prevalece al interior del órgano jurisdiccional y sobre señalamientos que indican que ha estado influido por un alto funcionario de gobierno que tiene la consigna de hacer ganar a los candidatos de la alianza PAN-PRD y que tal vez sea esto lo que mantiene callados a los magistrados.
También ha sido comentado por sus críticos el hecho de que el mismo presidente pasó de ganar un sueldo mensual de unos 140 mil pesos a 150 mil 41 y que podría dispararse a más de 260 mil considerando que recibe compensaciones quincenales de 56 mil 329 y una prima vacacional de 14 mil pesos al semestre.
Pues hay otro dato que ha llamado la atención y es el hecho de que Mónica Ruiz Saldaña, hermana y recomendada del consejero del INE Roberto Ruiz, ocupa el cargo de Jefa D en la Dirección de Capacitación Judicial del TEV. A ella la estarían ligando con la corriente que encabeza el dirigente de Morena Andrés Manuel López Obrador.
Por eso hemos comentado que las críticas afectan la imagen de la institución, que debería tener toda la credibilidad de los votantes pues su resoluciones son determinantes para la vida política del Estado.
Son diversas las reacciones que provocó la lista de candidatos plurinominales del PRI para el Senado que ayer salió de la encerrona que tuvieron los priistas en Toluca. En la posición número uno va Claudia Ruiz Massieu, en la dos Carlos Aceves, Vanessa Rubio en la tres, Miguel Ángel Osorio Chong en la cuatro, Beatriz Paredes en la cinco, Eruviel Ávila en la seis, Carolina Viggiano en la siete y Jorge Estefan en la número ocho.
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