Parecía que Morena tendría en el PAN, que aún gobierna Veracruz, a su principal enemigo, pero por lo visto en el partido del Peje ya no les va a hacer falta el rival azul cuando deje la gubernatura, al menos así lo evidencia el pleito que se traen entre ellos.
Los comentarios sobre las diferencias que mantienen confrontados a los grupos internos del partido que se llevó carro completo en la elección de julio pasado, se van confirmando con el paso del tiempo.
Están a pocos días de sentarse en la silla principal de Palacio de Gobierno, es decir, aún no asumen el poder a plenitud y ya sacaron a relucir sus diferencias.
Platican los que saben que los dimes y diretes que han protagonizado el senador Ricardo Ahued, el alcalde Hipólito Rodríguez y el aún dirigente estatal de Morena, Manuel Huerta, por el asunto del agua que viene de Puebla para Xalapa, es sólo la punta del iceberg.
Aseguran que la pugna interna por el poder es fuerte y es cuestión de tiempo para que veamos más pleitos con cualquier pretexto.
Es más, se preguntan si podrán llegar a gobernar y ayudar realmente a Andrés Manuel López Obrador con el proyecto que echará a andar como presidente del país.
Son varios los aspirantes a dirigir al PRI, a pesar…
Los críticos del PRI han sostenido que este partido ya cumplió su ciclo y que está prácticamente muerto y creen que difícilmente logrará recuperarse durante el próximo proceso electoral.
En Veracruz, por ejemplo, la próxima elección será en 2021 y aunque hay que esperar a ver el desempeño de Morena como gobierno, se esperaría que a ese partido le alcance el efecto Peje para volver a ganar por lo menos la mayoría de las plazas que ganó en julio pasado.
En el siguiente peldaño estaría el PAN, que vive un conflictivo proceso interno de relevo de su dirigencia, pero por el resultado que obtuvo en la elección pasada tendría posibilidades de reposicionarse entre el electorado. Todo va a depender de qué tan desgastado llegue el próximo dirigente.
A los demás partidos no se les ven muchas posibilidades, ni siquiera al PRI, pues le van a seguir pesando los errores que provocaron el desencanto de los ciudadanos.
Y a pesar de esas circunstancias son varios los anotados para relevar a Américo Zúñiga Martínez ahora que entregue la presidencia del CDE en noviembre.
Ya se ha dado a conocer la aspiración de Marco Antonio del Ángel y también la del exdiputado y candidato perdedor Carlos Morales.
En este espacio hemos comentado que han sido mencionados los nombres de Juan Carlos Molina Palacios y Alfredo Gándara para buscar la dirigencia partidista, así como el de la diputada federal Anilú Ingram y el de la diputada electa Érika Ayala.
A esa larga lista hay que agregar a Luis Sardiña Salgado, quien ya salió a decir que también quiere presidir el partido en el que ha participado toda su vida.
Bloque de gobernadores del sureste con AMLO, sin Veracruz
Fueron varios los columnistas políticos de la Ciudad de México que el fin de semana comentaron el surgimiento del bloque de gobernadores del sureste que busca trabajar de la mano con Andrés Manuel López Obrador. Fueron seis los que se reunieron y acordaron crear el llamado bloque del sureste.
Sostuvieron una reunión privada con el presidente electo en el entendido de que la región sur-sureste va a ser de las más apoyadas en el próximo gobierno con el tren maya y el tren transístmico.
Estuvieron el de Chiapas, Manuel Velasco; de Yucatán, Mauricio Vila; de Quintana Roo, Carlos Joaquín González; de Tabasco, Arturo Núñez; de Campeche, Alejandro Moreno, y el de Oaxaca, Alejandro Murat Hinojosa.
¿Y Veracruz?
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