/ martes 19 de febrero de 2019

Secretario bajo fuego

La solicitud de licencia del diputado federal Héctor Yunes Landa, la noche del lunes, y el rumor posterior de que era para hacerse cargo de la Secretaría de Gobierno, fue como una onda expansiva que se diseminó en el estado y, de nueva cuenta, tuvo que atajarla el propio gobernador Cuitláhuac García Jiménez, al reiterar que Éric Cisneros se mantiene en ese cargo. Desde la oficina del vicecoordinador y vocero de la bancada priista en San Lázaro hasta el día siguiente se envió un comunicado en el que se explica que hace unas semanas fue sometido a una intervención quirúrgica debido al rompimiento de un tendón de la mano derecha y (a) otro tipo de complicaciones; sin embargo, (por) la falta del reposo postoperatorio que le fue prescrito, provocó que la lesión se le complicara y tuviera que regresar el día de ayer al quirófano. Esa fue, y no otra, la causa de su separación temporal en la Cámara de Diputados, donde ayer mismo lo relevó su suplente, el caballeroso Edmundo Martínez Zaleta. Sin embargo, ésta no es la primera vez que se sueltan rumores de la renuncia del titular de la Segob. El lunes se aprovechó ese río revuelto para promover hasta al ex alcalde xalapeño Rafael Hernández Villalpando, como otra opción para sustituir a Cisneros Burgos, y antes ya le tendían la cama con la descabellada posibilidad de que fuera sustituido por el ex senador veracruzano Elías Miguel Moreno Brizuela, obuses que sólo pueden atribuirse al desgaste de este funcionario a tan sólo dos meses y medio de asumir ese cargo, y no precisamente por logros en su función. Lo de Yunes Landa, además, cuadraba por lo que reza aquel dicho de que “para que la cuña apriete, debe ser del mismo palo”, precisamente como el muro de contención que el gobernador necesita frente a las batallas que malamente se libran y las que vienen. Por lo pronto resultaron simples salvas los cañonazos disparados, en el escenario actual pueden esperarse muchos intentos más.

EL GOBERNADOR, SIN ASESORES

+++Ayer, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez desmintió que un policía federal haya sufrido de secuestro en el estado, como se difundió ayer en redes sociales y en noticieros nacionales de televisión, e hizo público un reclamo al fiscal general Jorge Winckler para que detenga a los secuestradores que andan sueltos en Veracruz y no sigan cometiendo esos delitos. Ya encarrerado, exigió al fiscal que “que ya entregue las carpetas concluidas de quienes son los responsables de los asesinatos (…) que investigue quién es el culpable, cuál es la banda (…) culpable del secuestro donde lamentablemente terminó degollada la víctima”, en referencia a la empresaria plagiada y muerta en Coatzacoalcos. Sí, el mandatario puede hasta exigir que se investigue, pero no puede pedir que se entreguen carpetas de investigación, eso sería violar la secrecía que exige la ley e cada indagatoria e invadir la competencia de responsabilidades. Que la Fiscalía debe ofrecer mejores resultados, es cierto y es necesario, como también lo es la prevención y disuasión del delito, que responsabilidad del gobierno estatal a través de la Secretaría de Seguridad Pública y ahora también de la Sedena, SEMA y Policía Federal que se coordinan para este propósito. En otras palabras, en el combate a la delincuencia hay corresponsabilidad, y ahí precisamente es donde deben enfocarse las autoridades, en vez de andar a la greña, como se dice coloquialmente.

Escriba a opedro2006@gmail.com

La solicitud de licencia del diputado federal Héctor Yunes Landa, la noche del lunes, y el rumor posterior de que era para hacerse cargo de la Secretaría de Gobierno, fue como una onda expansiva que se diseminó en el estado y, de nueva cuenta, tuvo que atajarla el propio gobernador Cuitláhuac García Jiménez, al reiterar que Éric Cisneros se mantiene en ese cargo. Desde la oficina del vicecoordinador y vocero de la bancada priista en San Lázaro hasta el día siguiente se envió un comunicado en el que se explica que hace unas semanas fue sometido a una intervención quirúrgica debido al rompimiento de un tendón de la mano derecha y (a) otro tipo de complicaciones; sin embargo, (por) la falta del reposo postoperatorio que le fue prescrito, provocó que la lesión se le complicara y tuviera que regresar el día de ayer al quirófano. Esa fue, y no otra, la causa de su separación temporal en la Cámara de Diputados, donde ayer mismo lo relevó su suplente, el caballeroso Edmundo Martínez Zaleta. Sin embargo, ésta no es la primera vez que se sueltan rumores de la renuncia del titular de la Segob. El lunes se aprovechó ese río revuelto para promover hasta al ex alcalde xalapeño Rafael Hernández Villalpando, como otra opción para sustituir a Cisneros Burgos, y antes ya le tendían la cama con la descabellada posibilidad de que fuera sustituido por el ex senador veracruzano Elías Miguel Moreno Brizuela, obuses que sólo pueden atribuirse al desgaste de este funcionario a tan sólo dos meses y medio de asumir ese cargo, y no precisamente por logros en su función. Lo de Yunes Landa, además, cuadraba por lo que reza aquel dicho de que “para que la cuña apriete, debe ser del mismo palo”, precisamente como el muro de contención que el gobernador necesita frente a las batallas que malamente se libran y las que vienen. Por lo pronto resultaron simples salvas los cañonazos disparados, en el escenario actual pueden esperarse muchos intentos más.

EL GOBERNADOR, SIN ASESORES

+++Ayer, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez desmintió que un policía federal haya sufrido de secuestro en el estado, como se difundió ayer en redes sociales y en noticieros nacionales de televisión, e hizo público un reclamo al fiscal general Jorge Winckler para que detenga a los secuestradores que andan sueltos en Veracruz y no sigan cometiendo esos delitos. Ya encarrerado, exigió al fiscal que “que ya entregue las carpetas concluidas de quienes son los responsables de los asesinatos (…) que investigue quién es el culpable, cuál es la banda (…) culpable del secuestro donde lamentablemente terminó degollada la víctima”, en referencia a la empresaria plagiada y muerta en Coatzacoalcos. Sí, el mandatario puede hasta exigir que se investigue, pero no puede pedir que se entreguen carpetas de investigación, eso sería violar la secrecía que exige la ley e cada indagatoria e invadir la competencia de responsabilidades. Que la Fiscalía debe ofrecer mejores resultados, es cierto y es necesario, como también lo es la prevención y disuasión del delito, que responsabilidad del gobierno estatal a través de la Secretaría de Seguridad Pública y ahora también de la Sedena, SEMA y Policía Federal que se coordinan para este propósito. En otras palabras, en el combate a la delincuencia hay corresponsabilidad, y ahí precisamente es donde deben enfocarse las autoridades, en vez de andar a la greña, como se dice coloquialmente.

Escriba a opedro2006@gmail.com