CATEMACO, Ver.– Entre imágenes satánicas y de la Santa Muerte, Gonzalo Aguirre Sánchez ejerce la brujería desde hace más de 25 años en este municipio.
Conocido como "el Apóstol del Diablo", señala que su trayectoria ha sido de amplio reconocimiento entre sus clientes, al grado de ser altamente recomendado incluso en el extranjero.
Te puede interesar: Cuida tus gatos negros; alertan de gente que los mata para rituales
¿Quién es el padre de el Apóstol del Diablo?
Se trata del hijo de Gonzalo Aguirre, el brujo que inició las misas negras durante marzo de 1970 y que a la fecha es recordado como uno de los mejores hechiceros de Catemaco.
Entrevistado en su consultorio cercano al malecón, en donde el olor a incienso y a hierbas es intenso, "el Apóstol del Diablo" dice que es un orgullo ser hijo del brujo más reconocido por las misas negras, además de que heredó su sabiduría y el poder de comunicarse con seres del más allá, entre ellos "el amigo".
Sin embargo, señala que no tiene interés de estar al frente de misas negras de forma masiva tras sostener que basta con hacerlas en un lugar adecuado, como su consultorio, para ofrecer culto a Satanás.
Diariamente, agrega, dedica tiempo a Lucifer para recargar energías y tener la capacidad de atender a quienes requieren de sus servicios.
Desde su punto de vista, en la actualidad el oficio de brujo no es respetado como en antaño, pues ahora, a causa de charlatanes, suelen ser objeto de burlas y de ofensas.
Los costos de los trabajos realizados por los brujos suelen ser de 5 a 7 mil pesos, una vez que haya resultados, aunque hay otros que llegan a pedir hasta 100 mil pesos.
Sin embargo, en ocasiones puede haber un precio más alto, pues no faltan aquellos que se postran ante el "Príncipe de las tinieblas" para ofrecerle lealtad eterna a cambio de ciertos favores, señala.
En Catemaco quedan alrededor de 15 brujos de reconocida trayectoria y que diariamente tienen que competir con los "más de 400 farsantes" que ofrecen servicios a través de redes sociales.
Vuelve a leer: ¿Te has hecho una limpia? Anuncian ofertas en primer viernes de marzo
Entre los clientes que diariamente acuden a él para pedirle su apoyo, la mayoría corresponde a mujer que requieren de amarres de amor; en el caso de los hombres, manifiesta, suelen pedir para que les vaya mejor en el trabajo.
Otros más, tanto hombres y mujeres, llegan para pedirle a Satanás llevar miseria, enfermedades y tragedias en contra de alguna persona que les sea molesta.
Gonzalo Aguirre Sánchez tiene un hijo y una hija mayores de edad, a quienes, al igual que a un sobrino, prepara diariamente para que puedan dominar la técnica de la brujería.