El gobernador del Estado, Cuitláhuac García Jiménez criticó que existan pseudo artistas que solo se interesan en lograr el consumo y no promueven la cultura de Veracruz.
En su discurso, tras entregar la medalla y diploma “Adolfo Ruiz Cortines” 2023 en el pleno del Congreso local al director del grupo de Son Jarocho “Mono Blanco”, Gilberto Gutiérrez Silva, señaló que los artistas locales han logrado posicionarse en varios espacios estatales, nacionales e internacionales, gracias a la constancia y su interés por mantener las tradiciones del estado.
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“En la entrega del máximo galardón estatal a quienes han contribuido notablemente al desarrollo cultural, social y comunitario de nuestros pueblos hoy hacemos visible una de nuestras más trascendentales expresiones culturales de nuestra identidad, el Son Jarocho”, dijo.
Reconoció la labor que el grupo de Son Jarocho “Mono Blanco” ha tenido en todos los espacios musicales en donde se ha presentado.
“Al entregarle al músico, poeta, laudero, gestor cultural, maestro Gilberto Gutiérrez Silva la medalla y diploma ‘Adolfo Ruiz Cortines’ estamos premiando a los soneros, a las zapateadoras, los líricos y a todos los artistas que mantienen el son del Sotavento más vivo que nunca”, expuso.
¿Por qué los llama "pseudo artistas"?
Manifestó que la identidad cultural de Veracruz ha sido rescatada “dentro de un mundo de confusiones pseudo artísticas y consumistas, haciendo una gran diferencia, el fandango que llama a disfrutar lo nuestro, musicalmente te invita a admirar la comunidad en que se desenvuelve entre palmeras, playa y viento fresco”.
“Las expresiones pseudo artísticas que se promueven comercialmente hoy en día sólo les interesa el bolsillo en un extravío musical, exclusivamente para alimentar el consumismo, tenemos que resaltar en contraposición que nuestra cultura musical autóctona también divierte, pero, sobre todo, te llama a la comunidad, es pícara y te forma musicalmente”, expresó.
Puntualizó que con la entrega del reconocimiento también se agradece a todos los soneros de Veracruz, quienes han dedicado su vida al desarrollo de la cultura.
“Su labor ha difundido el fandango por todo el mundo, Mono Blanco se ha presentado en más de veinte países, recorriendo prácticamente todos los continentes, de norte a sur, toda Latinoamérica, Europa, Asia, África y el lejano Oriente, así como Australia”, comentó.
Señaló que como resultado del renacimiento del Son Jarocho se debe resaltar la incursión de las mujeres en el son como versadoras, bailarinas e instrumentistas.
“Nuevas generaciones de músicos y decimistas continúan cultuvando con pasión la poesía popular, dando origen a nuevos sones que alimentan la imaginación y la creación de grupos infantiles y juveniles que fortalecen los eslabones generacionales que auguran un futuro prometedor para el género”, agregó.
