PAPANTLA, Ver.- A pesar de los avances de la ciencia y de la tecnología, estos beneficios poco llegan a las comunidades, donde las parteras se convierten en la mejor opción para que las mujeres del campo puedan dar a luz, por lo que las curanderas también suplen en mucho a los médicos, porque con sus remedios a base de plantas tradicionales y las “barridas” devuelven la salud a mucha gente, sobre todo en padecimientos como el “empacho”, el “cuajo”, entre otros.
De acuerdo con la señora Rosa San Martín Tiburcio, partera empírica, desde hace 50 años aprendió a traer niños al mundo y con la evolución de la ciencia también se tomó en cuenta esa actividad para suplir la actividad de doctores, que hasta la fecha escasean en las comunidades, además de que otro motivo para que su actividad incremente es el machismo que prevalece en los pueblos originarios, por lo que son las parteras las que se encargan de la atención de las mujeres embarazadas, ahora en la mayoría de los casos con la orientación médica.
San Martín Tiburcio refiere que han recibido capacitación de médicos, de forma tal que llegado el momento no pongan en riesgo la salud de las parturientas, por lo que en un trabajo de parto difícil, las mujeres son canalizadas a una clínica o a los hospitales de la zona, con lo que se apoya en la disminución de muertes maternas que se presenta, debido a diversas complicaciones como la falta de ambulancias para el traslado de las mujeres embarazadas.