PEROTE, Ver.– En cuanto concluya la rehabilitación de la Fortaleza de San Carlos en Perote, el sitio estará seguramente en condiciones adecuadas y dignas para que todos los mexicanos tengan acceso porque es un inmueble histórico y es parte del legado cultural nacional, explica el sargento segundo historiador de la Secretaría de la defensa Nacional (Sedena), Ricardo Álvarez García.
Ayer en una ceremonia en la que militares de todos los rangos acudieron a este inmueble para conmemorar el bicentenario de que se fundó el Heroico Colegio Militar, recordó que fue construida de 1870 a 1877 para hacer un fuerte que detuviera la amenaza de una invasión inglesa a la Nueva España.
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Agrega que existía el riesgo de que el ejército inglés llevará por Veracruz dado que ya había tomado de La Habana, Cuba. La Fortaleza se edificó con la intención de que en caso de que el fuerte de San Juan de Ulúa fuera tomado se convirtiera en un sitio estratégico para detener el avance a la capital de la Nueva España en ese momento.
Este edificio es un ejemplo de la arquitectura militar de la Nueva España. Es de piedra con bastiones, cañoneros, almenas y fosos.
Aquí murió el 21 de marzo de 1843 el primer presidente de México, el general Guadalupe Victoria
Todos estos hechos son lo que dieron el origen a este emblemático lugar. Menciona que su construcción es en forma de pentágono cuenta con cuatro módulos vigías para tener un control total porque era el camino real y por el lugar circulaba la economía que movía a la Nueva España, todo lo que iba y venía de Europa pasaba por este sitio.
El sargento segundo historiador de la Sedena que cuando se fundó el Colegio Militar ya era un México independiente, “los que se integraban a esta institución era cualquiera que hubiera nacido en México, sin importar su casta social y económica”.
Explica que como militar considera que el legado del Colegio Militar es primordial al país porque siempre han entregado todo por el país como lo dice su lema “todo por el honor de México”.
Dice que a la Sedena lo llena de orgullo ser parte de la rehabilitación del inmueble porque a través de su historia ha tenido numerosas funciones: primero como fortificación militar, pero ya vez consuma la independencia albergó el Colegio Militar y con el paso de los años se convierte en una especie de bodega para almacenar alimentos y eso propicia un desgaste “por lo que para nosotros el poder rescatarlo y tratar de llevarlo a recuperar su belleza es una meta como parte de estos festejos del bicentenario”.
Indica que están en la primera etapa del plan de rescate, pero en cuanto esté en óptimas condiciones se verá con el INAH y todos los que tengan que ver para analizar de su uso, para que todos los mexicanos puedan disfrutarlo.
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Remarca que cuando el inmueble esté en condiciones adecuadas y dignas seguramente todos los mexicanos tendrán acceso porque es una instalación histórica del país y es parte del legado cultural.
