La administración de Javier Duarte de Ochoa dejó una deuda de 700 millones de pesos por contratos que se hicieron utilizando recursos del Fondo para Desastres Naturales (FONDEN) en el 2013.
En conferencia de prensa, el gobernador del Estado, Cuitláhuac García Jiménez, dio a conocer que el desvío de recursos de dicho Fondo fue por alrededor de 500 millones de pesos; sin embargo, aumentó 200 millones de pesos por los intereses que se generaron porque se dejó de pagar desde el mismo 2013.
“Esta deuda generó un pasivo en cuatro contratos por despensas con la empresa Soriana, la deuda es de alrededor de 700 millones de pesos, fue generada en la administración de Javier Duarte, fue la de 2013, despensas, apoyo, casi todo es despensas”, dijo.
Refirió que se logró un convenio con la empresa para que se condonaran los intereses y con ello dar continuidad al pago.
“El daño, por esa corrupción fue mucho, ¿por qué dije 500 millones de pesos?, entramos en pláticas con la empresa y acordamos quitarnos los intereses, pero que salga”, expuso.
En su opinión, la desaparición del FONDEN permite que actualmente los apoyos y recursos para la remediación de daños se entreguen de manera directa, sin ninguna inmediación y, con ello, se evitan desvíos.
“Nosotros vamos a continuar en esa línea, con este tipo de acciones, queremos que los apoyos lleguen a los verdaderos afectados, sin intermediarios, antes se hacían este tipo de convenios y todos se frotaban las manos con el FONDEN porque era dinero para el bolsillo, pero eso ya cambió”, expresó.
