A través de un manual que incluye imágenes y dibujos divertidos y explicativos, con un concepto didáctico, en los que se ejemplifican los conceptos básicos de anatomía, fisiología, alimentación y toma de muestras biológicas de ratas, ratones y conejos, Paola Sabina Contreras Romo, encargada del área de morfología de la Unidad de Ciencias de la Salud (UCS) de la Universidad Veracruzana, publicó recientemente el Manual para el manejo adecuado de animales de laboratorio.
El texto representa una guía de consulta con sentido ético y pretende reforzar los conocimientos de estudiantes, académicos y personal de apoyo que están o estarán en contacto con este tipo de animales.
En el manual, que es publicado por la colección Textos Universitarios de la Editorial UV, Contreras Romo aborda el manejo de tres especies de animales de laboratorio (ratas, ratones y conejos), que frecuentemente se mantienen en los bioterios de esta casa de estudios.
Hace referencia a los aspectos más relevantes relacionados con la seguridad física de los animales, así como de las personas que los manipulan con distintos objetivos académicos, citando algunos analgésicos y fármacos para roedores y logomorfos (conejos), además de detallar su uso de acuerdo a la Norma Oficial Mexicana (NOM) 062-ZOO-1999; puntualiza también las situaciones que ameritan provocar la eutanasia, para lo cual precisa los métodos permitidos y los prohibidos.
Al final, y acorde con el Comité Institucional para el Cuidado y Uso de Animales de Laboratorio, comenta algunas consideraciones relacionadas con el bienestar animal. “No hay otro trabajo similar a éste que le anteceda”, puntualizó la autora.
Bióloga de formación con doctorado en Educación, Paola Sabina Contreras compartió que se ha evidenciado que en ocasiones se causa algún daño involuntario al animal en estudio, poniendo en riesgo a la persona que lo esté manejando, de ahí que considerara necesario elaborar este manual con el objetivo de hacer un manejo adecuado de estos ejemplares; además puede ser utilizado como material adicional para los estudiantes.
Aclaró que no pretende que se deje de trabajar con animales de laboratorio, aunque considera que existen algunas pruebas en donde pueden ser reemplazados para la investigación; “donde es necesario utilizarlos, que se haga de manera adecuada para evitar dañarlos o poner en riesgo a quienes trabajan con ellos”, reiteró.
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